El movimiento islamista Hamás, que controla la Franja de Gaza, informó hoy sobre la detección de los primeros casos de la variante británica de coronavirus, coincidiendo con un marcado aumento de contagios en el enclave, que en los últimos días registró índices de positivos de en torno al 25%.

Si bien el Ministerio de Sanidad de Hamás no confirmó cuántos fueron los casos detectados portadores de esta mutación, las autoridades del enclave se mostraron muy preocupadas por cómo esto pueda repercutir en la propagación del virus.

Durante las últimas semanas la Franja de Gaza ha registrado un incesante aumento de contagios diarios, que hoy alcanzaron los 815 casos en 24 horas y se acercaron a los picos de alrededor de 1.000 detectados a finales de diciembre.

Uno de los factores más preocupantes del veloz aumento de infecciones es la tasa de pruebas positivas, que durante la semana pasada oscilaron en torno al 20% y en los últimos dos días llegaron a en torno al 25%. Los nuevos casos detectados han elevado la cifra de pacientes activos a más de 6.500, de los cuales 181 se encuentran hospitalizados, 109 de ellos en estado grave.

En base a esta situación, las autoridades de Hamás advirtieron que podrían endurecer las restricciones, que actualmente consisten en un toque de queda nocturno, y a lo que podría sumarse un confinamiento durante los fines de semana.

Por otra parte, la campaña de vacunación en el enclave avanza lentamente, con menos de 17.500 inoculados de una población de unos dos millones de personas. Según un portavoz de Sanidad, hasta el momento son 81.600 las dosis de la vacuna contra el coronavirus que han llegado a la franja, en su mayoría donadas por Emiratos Árabes Unidos y por la Organización Mundial de Salud (OMS), a través del mecanismo gratuito COVAX. Por otra parte, hoy se espera la llegada a Cisjordania ocupada de un lote de 100.000 vacunas de Sinopharm donadas por China, de las cuales una parte se enviaría a Gaz