Estas dos últimas semanas me encuentro de visita familiar en Lima, Perú.
Lo que más me gusta de viajar, aparte de conocer lugares, arte y gente interesante, es la posibilidad de degustar la gastronomía de cada lugar, probar sabores diferentes y agregarlos a mi dieta, si estos me agradan.

Sin embargo, en esta visita me encuentro con un elemento que ya era parte de mi alimentación, pero que no había pensado en incorporar en mi rutina capilar: las semillas de chía.

Están consideradas como un superalimento, por todas las propiedades y beneficios que aportan a la salud general. Se sabe que son una excelente fuente de fibra y antioxidantes ácidos grasos y omega 3 (ácido alfa-linolénico) de origen vegetal, y absorben entre 10 y 12 veces su peso en agua, por lo que ayudan a mantener la hidratación. Además son buenas para deportistas y personas que están normalmente muy activas, que las pueden tomar antes de ir al gimnasio o de salir a correr.

A las semillas de chía se les atribuye dos veces la proteína de cualquier otra semilla, cinco veces el calcio de la leche, y grandes cantidades de ácidos grasos esenciales. También son fuente de magnesio, manganeso, cobre, niacina, zinc y otras vitaminas.

La forma más común de consumir chía es mezclando las semillas con agua, zumo o algún alimento líquido, pudiendo absorber muy rápidamente en menos de 10 minutos una gran cantidad de líquido. Yo la preparo en las noches, mezclando tres cucharadas de semillas con una taza de agua y en la mañana la adiciono al yogur, a las frutas, a algún jugo o la mezclo con avena. La sensación es de haber comido bien y realmente aporta energía para comenzar el día.

En el cabello. Para elaborar un gel completamente natural que no resecará ni maltratará tu cabello, agrega cuatro cucharadas de semillas de chía y dos tazas de agua en una olla, a fuego medio por cinco minutos o hasta que tome la consistencia deseada. Cuela con una media nylon y utilízalo para estilizar el cabello. Para rizos definidos, aplica por secciones con los dedos y deja secar al natural.

Es excelente para que no tengas que preocuparte por el uso de químicos en el cabello, sin alcohol ni conservantes, solo debes mantenerlo en la nevera para evitar que se descomponga.
¡Feliz resto de la semana!