El movimiento juvenil “Generación de Cambio” consideró que en la conmemoración del Día Nacional de la Juventud, los jóvenes dominicanos no tienen nada que celebrar, ya que han sufrido un abandono histórico por parte de los diferentes gobiernos.

“En el país existen 800,000 Ninis (jóvenes que ni trabajan, ni estudian) y se encuentra en primer lugar en tasa de desempleo en toda la región. Además, RD ocupa uno de los 5 lugares en embarazo de adolescentes en Latinoamérica y el segundo en el Caribe. También, tenemos el primer lugar con el 12.3% de las mujeres de 20 a 24 años casadas o en unión antes de los 15 años y 35.6 % antes de los 18 años”, lamentó.

Dijo que la Ley General de Juventud, Número 49-00 creada en el año 2000,cuyo objeto era instaurar el marco jurídico, político e institucional que oriente las acciones del Estado y la sociedad en general hacia la definición e implementación del conjunto de políticas necesarias, para lograr la satisfacción de las necesidades y expectativas de la población joven de la Nación, así como una efectiva participación de los jóvenes en los procesos de toma de decisiones, ha sido un fracaso por su falta de inoperancia.

Generación de Cambio señaló que este mecanismo legal establece un rango de edad entre 15 y 35 años al periodo de la juventud, y que de acuerdo a estimaciones poblacionales de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), el 33.9% de la población total del país era joven en 2018, y, de ella, 36.9% se ubica entre 18 y 24 años, que resulta el principal subgrupo etario, seguido del subgrupo conformado por las personas de 25 a 29 años (24.4%), el subgrupo compuesto por las personas de 30 a 35 años (22.2%) y, finalmente, el subgrupo integrado por las personas de 15 a 17 años (16.5%),constituyendo la juventud el 40.7 de la población votante, es decir, que serían determinantes en un proceso electoral.

El movimiento aseguró que otro problema que afecta a la juventud dominicana es la falta de participación en los estamentos de poder, en los espacios de toma de decisiones, como el gobierno central, los congresos y los gobiernos locales, y de los pocos jóvenes que han podido alcanzar una posición de toma de decisión, son muy escasos los que han demostrado compromiso con lamentablemente promover el bienestar juvenil.

Finalmente, expresó su confianza en que la actual gestión del Ministerio de la Juventud reorientará su trayectoria acercándose a los jóvenes y por primera vez cumpla su responsabilidad legal de protegerlos e impulsar su desarrollo.