“No vivas para que tu presencia se note, sino para que tu ausencia se sienta”. Bob Marley
Lanzó el primer juego sin hit ni carrera del béisbol profesional dominicano.
Tiro no hitter con ambos equipos de la capital y su primero fue contra los Tigres del Licey con el uniforme de los Leones del Escogido.
Diómedes -Guayubín- Olivo se le reconoce como uno de los símbolos de los Tigres del Licey por sus grandes hazañas que contribuyeron a escribir la historia de gloria y tradición del equipo capitaleño, la Montaña Noroestana. tiene su número ( 9), retirado en la organización Añil.
El mejor lanzador zurdo de este béisbol, es dueño de varias marcas, como las 86 victorias por vida y sus 160 ponches propinados en la temporada 1960-61 que se disputó solo con jugadores nativos.
Por vida ponchó 742 bateadores, lanzó 13 blanqueadas, en cuatro temporadas obtuvo 10 o más triunfos y concluyó con efectividad de 2.11.
Tiro tres no-hitter “La Montaña Noroestana”.
En uno de los tantos torneos que se realizaron entre 1937 y 1950 sin el rigor que se puso vigente en 1951, Olivo se uniformó por única ocasión con el Escogido y dejó sin hit y pintó de blanco al Licey. Fue el 28 de septiembre de 1947 en el campo del hipódromo Perla Antillana, también utilizado como escenario para el béisbol de la época. José -Achín- Matos fue el rival por los azules.
El 29 de mayo de 1954 en el estadio de La Normal, el zurdo de los Tigres del Licey dominó a los Leones del Escogido en un partido sin Hits ni Carreras que terminó 3-0 a favor de los 22 veces campeones nacionales.
A sus 44 años, el 22 de julio de 1963 en partido recortado a siete episodios de la Liga Internacional, Triple A de Estados Unidos, Guayubín recetó su tercera medicina sin hit ni carrera. La víctima fue el equipo Toronto, al que venció por 2-0, mientras lanzaba para el Atlanta, sucursal de los Cardenales de San Luis.
Ese fue el año de su retiro del béisbol internacional y del invernal.