Incertidumbre y nostalgia son los signos distintivos del presente. Hoy, como nunca, los cambios son trepidantes y se suceden uno tras el otro, sin que se tenga un tiempo de calidad para procesarlos y sacar conclusiones mínimamente convincentes. Esta circunstancia provoca varias actitudes/interpretaciones y/o justificación de los hechos y posiciones de muchos en la esfera de la política, sobre todo en el extenso abanico de sectores que se reclaman progresistas. Para muchos, el tiempo de la certidumbre ha pasado sin que un significativo número de ellos se haya dado cuenta. Otros sí lo han entendido, pero no logran encontrar una respuesta/propuesta a una realidad en incesante cambio.

Aquí, para las próximas elecciones se ha oficializado una alianza entre partidos de las esferas progresistas con el partido de Gobierno, y aunque se mantiene la propensión de los primeros andar cada uno por su lado, esto podría cambiar favorablemente si se sabe aprovechar el factor Guillermo Moreno que, asumiendo la ética de la responsabilidad, se presenta como candidato a senador por el Distrito Nacional en la boleta del PRM. Por ser conocedor a fondo del sistema y Poder Judicial y vertical en la lucha contra la corrupción, podría impactar positivamente y consolidar y ampliar los logros del Gobierno en materia de transparencia de los procesos de compras y contrataciones y del manejo de los fondos de áreas administrativas claves.

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Los sectores progresistas no deben limitar sus objetivos a simples puestos congresuales o municipales, deben pujar por puestos en esferas importantes del Gobierno y este tener presente que el Gobierno tiene en puestos decisivos a figuras que por su trayectoria de compromiso por los mejores intereses del país y sus solvencias personal y profesional son tan progresistas que los que reclaman de esa corriente.

El éxito de la referida alianza descansa en la conjugación de esos factores y en el diseño de iniciativas mínimas en temas de seguridad ciudadana, medio ambiente, migratorio, inclusión social, empleo de calidad para los jóvenes que buscan insertarse en el sistema productivo, reformas políticas, en la gestión de territorio y de lo urbano etc..

Es importante tener presente que aun con sus evidentes malos resultados, en términos globales, no pocos Gobiernos social demócratas tienen logros que exhibir en temas de derechos ciudadanos en sentido lato debido a las luchas que, en el tiempo, desde fuera o dentro de esos Gobiernos, han desarrollado sectores de izquierda.