Adriana, hija del presidente Luis Abinader, pidió este sábado que su regalo de graduación se lo enviaran a los niños de Gaza.

Así lo dio a conocer su hermana Graciela, en la red social X (antiguo Twitter).

Explicó que en medio de la velada, su madre, la primera dama de la República, Raquel Arbaje, relató una conversación que tuvo con la festejada una semana previo al evento.

«Durante la cena de graduación de mi hermana Adriana el sábado por la noche, mi mamá relató una conversación que tuvo con ella la semana pasada. Contaba que cuando le preguntó a Adriana qué quería de regalo de graduación, en lugar de solicitar dinero en efectivo o cualquier otro obsequio, pidió que en vez de que le dieran un regalo, se lo entregaran a los niños en Gaza y le enviaran el recibo», dijo.

Expresó que su intención al escribir esto, más allá de imponer una opinión sobre el conflicto en el Medio Oriente, es dar a conocer que la solicitud de Adriana refleja su compromiso con el bienestar de los demás y su deseo de contribuir de manera significativa.

«No menciono esto para imponer una opinión sobre el conflicto en el Medio Oriente. Lo cuento por dos razones. Primero, porque a pesar de la fiesta de la democracia que celebramos los dominicanos este domingo, no quería dejar pasar la oportunidad para felicitar a mi hermana menor, Adriana, quien se graduó de dos carreras en cuatro años», comentó.

También felicitó a sus padres por la victoria del pasado domingo 19 de mayo en las elecciones presidenciales y congresuales, además de las enseñanzas que les ha inculcado.

«Quería aprovechar la oportunidad para felicitar a mis padres, no solo por la victoria del domingo, sino por sus enseñanzas. Gracias por enseñarnos a pensar críticamente, ser buenas personas, pero sobre todo, por inculcarnos que el éxito no radica en los lujos que alcanzas, sino en el bien que haces con los lujos que te han tocado, incluyendo la obtención de tu licenciatura, Adriana. Gracias, hermana, por ser el vivo ejemplo de las enseñanzas de nuestros padres. Te amo y te admiro ¡Felicidades a la bebé de la casa!», concluyó.