Hoy hace un año de la muerte del veterano periodista Rafael Molina Morillo

Hoy hace un año de la muerte del veterano periodista Rafael Molina Morillo

Hoy dos de abril se cumple un año de la muerte del veterano periodista Rafael Molina Morillo  a la edad de 87 años, quien era director del periódico El Día.

El destacado comunicador nació en La Vega el 31 de marzo de 1930. Hijo de Icelsa Morillo y Domingo Molina.

Rafael se casó con Francia Espaillat Franco con quien procreó cuatro hijos: José Antonio, Amelia, María Alicia y Silvia María. Además de periodista, “el doctor” como cariñosamente se le conocía, se desempeñaba como abogado y diplomático.

En 1966 creó el vespertino El Nacional, medio de comunicación que enfrentó la violación a los derechos humanos característica de los gobiernos del doctor Joaquín Balaguer (1966-1978).

En los albores de la vida democrática, en 1979, el abogado y veterano periodista vende El Nacional el empresario José Luis Corripio, presidente del Grupo de Comunicaciones Corripio.

Posteriormente Molina Morillo diversificó su presencia en los medios de comunicación pues incursionó también en los medios electrónicos con programas de radio y televisión. Además fue embajador en Estados Unidos y Canadá en el Gobierno de Antonio Guzmán (1978-82).

Dirigió el periódico Listín Diario y ocupó importantes cargos en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), inclusive el de presidente, y fue presidente y fundador del Centro para la Libertad de Expresión en la República Dominicana.

En el 2010 recibió el Premio Nacional de Periodismo de parte del Ministerio de Educación y el Colegio Dominicano de Periodistas.

Fue director de la Escuela de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Católica Santo Domingo, presidente del Consejo Nacional del Premio APEC al Periodismo y dirigió la Asociación Dominicana de Periodistas y Escritores.

Publicó los libros “La Prensa y la Ley en Santo Domingo”, “Gloria y Repudio, Biografía de Pedro Santana”, “Personalidades Dominicanas”, del que publicó dos tomos, y “Mis recuerdos imborrables”.