La gente se mantuvo activa este fin de semana, pero sin el notable «teteo» (fiestas, parrandas) que trascienden en distintos sectores y en redes sociales. La razón de ese comportamiento es atribuida por algunas personas a dos cosas: la consciencia sobre la propagación del COVID-19 y las lluvias registradas en estos días.
Para Carlos Olivero, al parecer las personas han comprendido los niveles de riesgo que implica exponerse en actividades grupales con música y bebidas. Agrega que esa es la razón por la cual se han ajustado a la modificación del horario del toque de queda que rige hasta el día nueve de este mes.
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En sectores como el Ensanche Isabelita, Los Ríos, el Ensanche La Fe, Los Girasoles y otros, se visualizaron personas socializando en colmados, al frente de las casas y algunas esquinas, pero sin que eso signifique un descontrol en relación a sus comportamientos.
Como es natural, mientras llovía las personas se cubrían en la parte interior de los colmados para continuar con juegos como el de dominó, hasta que el negocio decide cerrar sus puertas por el toque de queda a partir de las 3:00 de la tarde.
El Poder Ejecutivo dispuso mediante decreto la modificación del horario de toque de queda, de acuerdo a la incidencia del COVID-19 en las diferentes provincias del país.
El horario que rige es desde las 6:00 de la tarde hasta las 5:00 de la mañana, de lunes a viernes, y los sábados y domingos desde las 3:00 de la tarde hasta las 5:00 de la mañana.