El Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) entregó ayer restos de otras diez personas fallecidas tras la explosión registrada el pasado 14 de agosto en una zona comercial de San Cristóbal, las cuales fueron identificadas mediante prueba de ADN.
Con estos suman 25 las víctimas identificadas mediante ese procedimiento, y entregadas a sus familiares.
Totalizan hasta ahora 38 las personas fallecidas a causa del siniestro que además dejó decenas de heridos y otros con quemaduras de consideración.
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El director general del Inacif Francisco Gerdo, informó que ya fue completado el proceso de ADN de los 20 levantamientos que se hicieron en el lugar del siniestro.
Dijo que de nueve de ellas “no hay coincidencia con las familias que están a la espera de saber de sus familiares desaparecidos”, pero que el Inacif continúa trabajando para la identificación y entrega de esos restos.
Las partes de cuerpos o cadáveres calcinados por el fuego de las diez personas identificadas fueron entregadas a sus familiares en la unidad del Inacif que funciona en el Cementerio Cristo Redentor de esta capital.