FOTO DE ARCHIVO: Un local cerrado debido al broto de la enfermedad de coronavirus (COVID-19) en Brooklyn Nueva York, EEUU, 26 de marzo del 2020. REUTERS/Stephen Yang
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, y el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, instaron ayer al Congreso estadounidense a entregar más ayuda a las pequeñas empresas, cuando la pandemia de coronavirus avanza y preocupa que el alivio de una vacuna no llegue a tiempo para evitar que quiebren.
Dijeron que las pequeñas empresas de Estados Unidos siguen en riesgo en medio de un aumento del coronavirus, con Mnuchin sugiriendo reservar 300.000 millones de dólares para subvenciones a las complicadas compañías.
“Estas empresas no pueden esperar dos o tres meses”, dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, a la Comisión de Banca del Senado, instando a los legisladores a reutilizar los fondos que se están recuperando de otros programas de la Fed para colocar tal vez 300.000 millones de dólares en subvenciones para firmas en problemas.
La decisión de Mnuchin de cerrar esos programas de emergencia a fines de este mes fue el foco de las disputas entre los partidos durante la audiencia. Los republicanos acordaron que son más apropiadas otras formas de ayuda ahora que está a la vista una vacuna y los demócratas argumentan que los programas de la Fed deberían mantenerse hasta que la recuperación económica se complete.
Pero hubo un acuerdo más amplio en que las próximas semanas podrían ser críticas para determinar si una recuperación del país mejor de lo esperado puede mantenerse hasta que se sienta el impacto de la vacuna, o se debilitará a medida que el virus se propague, y algunas familias comienzan a quedarse sin dinero.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, hablando en la misma audiencia, dijo que estaba de acuerdo en que las subvenciones serían más apropiadas en este momento para ayudar a las empresas y familias en riesgo a sobrevivir el invierno.
“Las personas que están en trabajos de cara al público, en industrias de cara al público, pueden ver la luz al final del túnel a mediados del próximo año (…) Es posible que necesiten más ayuda para llegar allí”, afirmó Powell, refiriéndose a restaurantes, hoteles y lugares de entretenimiento que han sido los más afectados por la pandemia.