El director ejecutivo del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) informó que asumió el control del tráfico y la red semáforos del Gran Santo Domingo, al rescindir el contrato de esos servicios a la empresa Transcore Latam SRL, porque comprobaron que el caos que afectó a 55 intersecciones del Distrito Nacional los días 28, 29 y 30 de agosto fueron provocados por regulaciones que efectuó la empresa sin la autorización de esa institución.

Asimismo, Milton Morrison solicitó al Ministerio Público una investigación sobre lo acontecimientos en el sistema de semáforos, a los fines de determinar responsabilidades.

Anunció que de manera unilateral queda anulado el contrato firmado el 19 de junio del 2023, y cualquier otro derivado del mismo, con todas las consecuencias legales pertinentes.

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En sentido, dijo que su silencio en los días del caos en el servicio se debió “a las acciones estratégicas para devolver al Estado lo que le pertenece al Estado”.

Afirmó que la intervención del Intrant evitó un colapso mayor, pero el incidente dejó evidenciada la fragilidad de la infraestructura semafórica y la necesidad de un control centralizado desde el propio Intrant. Explicó que en la noche del 27 de agosto, técnicos del Intrant detectaron que Transcore Latam, contrata para modernizar, ampliación y gestión del tráfico y la red semafórica del Gran Santo Domingo, procedía a reemplazar dispositivos y reguladores semafóricos, sin consentimiento, incurriendo en violación a los acuerdos establecidos.

De inmediato, le notificaron el incumplimiento, pero en lugar de rectificar, “Transcore cesó todos sus servicios al Intrant a las 10:44 p.m. del mismo 27 de agosto; notificando su decisión, a través de un chat interno entre sus técnicos principales y funcionarios del instituto”.

Morrison atribuyó la decisión unilateral al caos vial comenzó afectando 29 intersecciones críticas de la ciudad.

Manifestó ante la crisis y el riesgo en la seguridad pública, la noche del jueves 29 de agosto, decidieron intervenir por primera vez y de manera directa, los semáforos. “El equipo logró retomar el control manual del sistema semafórico, garantizando la independencia de la empresa Transcore, para gestionar cualquier avería que pueda surgir en el futuro”.