Jueces dicen pruebas contra exoficiales son “indiciarias”

Jueces dicen pruebas contra exoficiales son “indiciarias”

Luego de un proceso judicial que duró cinco años y cinco meses, los jueces del Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional declararon ayer no culpables a los acusados de supuestamente recibir los US$3.5 millones de sobornos por la compra de los aviones Super Tucano.

El pago habría sido hecho por la empresa brasileña Embraer, a cambio del contrato para la compra de una flotilla de aviones Super Tucano que adquirió el Estado dominicano en el 2008, valorada en US$94 millones.

La sentencia mediante la cual fueron descargados de toda culpabilidad el exministro de las Fuerzas Armadas Rafael Peña Antonio; el excoronel Carlos Picini Núñez; el empresario Daniel Aquino Hernández, y dos empresas que, según el Ministerio Público, fueron utilizadas para “lavar” el dinero del soborno, fue aprobada a unanimidad.

Justificaron su decisión, entre otras cosa, al indicar que cuando analizaron los hechos de la causa y los confrontaron con las pruebas sometidas al debate, observaron que las pruebas del proceso poseen una naturaleza indiciaria, lo que implica que deben ser plurales y más importante aún, plenamente acreditadas, conectadas y relacionadas con el hecho punible.

Señalaron que el MP dice que Peña Antonio fue quien tuvo el dominio de compra de los aviones “manejando las transacciones ilícitas”, y que para eso se hizo asistir de Piccini Núnez, para que fuera éste quien diera la cara en las negociaciones y coordinara lo relativo a la recepción y entrega del dinero (sobornos).

Sin embargo, el tribunal de jueces resalta que se trató de una compra de Estado, regulada por la Constitución, y que la facultad es atribuida al presidente de la República bajo la condición de que sea aprobada por el Congreso; lo que significa que “el presidente de la República necesitará de la aprobación de los miembros del Senado y de la Cámara de Diputados”, subrayaron.

Agregan que, la idea del proyecto Super Tucano, “contrario a lo sostenido por el MP, no fue de Peña Antonio”, sino, de su antecesor en el cargo,

Nelson Marmolejos Acosta, quien declaró como testigo que, fue él quien poco antes de salir, “contactó al ejecutivo de Embraer para revisar los detalles de tipo económico de los aviones, y que no le dio continuidad al proyecto porque su gestión estaba llegando a su fin”.

Agregan que, tampoco es cierto que fuera Peña Antonio quien reincorporó a Piccini para ejecutar el plan, sino que lo aprobó el presidente de la República de entonces.