Los positivos resultados y el gran impacto que tuvieron los Sextos Juegos Deportivos Escolares realizados recientemente en la ciudad de La Romana, fue una demostración del gran potencial y promisorio futuro de nuestro deporte, siendo determinante el respaldo logístico y financiero del Gobierno a un evento que apuesta a convertirse en la competición más importante a nivel nacional.

La falta de continuidad de este certamen desde que se realizó la primera versión hace más de medio siglo, ha sido una de las fallas para que no haya podido establecerse como un acontecimiento tradicional de carácter cíclico cada dos años.

Durante décadas las distintas administraciones le dieron poca importancia a la educación física como materia curricular y al deporte escolar, asignándole recursos irrisorios, razón por la cual dichos programas eran casi inexistentes en los planteles públicos.

Con la llegada a la Presidencia de la República del Lic. Danilo Medina, quien de inmediato puso en vigor el mandato legal de otorgarle al Ministerio de Educación el 4% del Presupuesto del Estado, y a partir de la designación del doctor Carlos Amarante Baret al frente de ese organismo, la situación del Deporte Escolar parece encaminarse hacia puerto seguro. La mejor prueba fue el amplio respaldo material para el cumplimiento de la exitosa jornada de los VI Juegos, organizados por la cartera educativa y el Instituto Nacional de Educación Física (INEFI) con la colaboración del Ministerio de Deportes, el sector federado y las autoridades locales.

Sin embargo, es propicia la ocasión para esperar que a partir de estos resultados se le otorgue una mayor asignación fija anual al INEFI para cubrir la gran demanda de servicios en el sector, pues todavía cuenta con una limitada partida, pese al considerable incremento de recursos al renglón educativo.

La gran cantidad de convivios y torneos en edad escolar organizados previamente por la cartera deportiva con la colaboración de las federaciones, contribuyeron para allanar el camino de la etapa clasificatoria que involucró a cientos de miles de estudiantes atletas.

Si bien al cuadro directivo del INEFI encabezado por el Lic. Ángel Danilo Mesa hay que darle un voto de reconocimiento por su efectivo trabajo, desde ahora le recomendamos llevar a cabo un encuentro evaluativo de los distintos aspectos del pasado evento, con el fin de optimizar y visualizar su programación en el orden metodológico, técnico y participativo.

Por ejemplo, se debe coordinar con los demás organismos del sector, principalmente con el Ministerio de Deportes y las federaciones, un programa de seguimiento de los talentos que fueron detectados en los VI Juegos, para lo cual se requiere un personal especializado y la creación de laboratorios modernos de pruebas funcionales, necesarias para una sana práctica de los deportes.

De ahí que un asunto de primer orden a ser tomado en cuenta dentro del sistema del deporte escolar en la actualidad es que los niños y jóvenes deben estar sujetos a un control de salud tan frecuente como los médicos, los monitores y los entrenadores lo juzguen necesario.

Los organismos internacionales especializados recomiendan que cuando un alumno participe en deportes de competición, debería confeccionarse una ficha médica especial para él, durante el tiempo que practiquen dichas actividades.

Esta iniciativa y otros avances, deben ser considerados, con miras hacia los Séptimos Juegos Escolares, Moca 2016, y otros eventos en el marco del calendario deportivo doméstico en procura del esperado salto cualitativo, siempre contando con el firme apoyo de las máximas autoridades gubernamentales.