La Escuela de Formación Electoral y del Estado Civil recibió hoy casi un centenar de jóvenes en ocasión de la Jornada de conversatorios sobre juventud y democracia. Los asistentes representaron instituciones vinculadas al quehacer político y social del país, interesados en temas electorales, de democracia e inclusión.
El organizador de este conversatorio, Francisco Lapouble Segura, coordinador de Formación Ciudadana de la EFEC, aseguró a los presentes que la educación, actualización y participación son los “pasos fundamentales para abrir o derribar puertas y ocupar los espacios” que anhelan los jóvenes, y acto seguido dio paso a las ponencias.
Los conferencistas fueron los politólogos Ricardo Pérez Fernández, Eddy Manuel Pérez, y la diputada por la provincia de Santo Domingo, Gloria Reyes.
En la primera ponencia, «Hacia el fortalecimiento de una democracia incluyente», Pérez Fernández instó a los jóvenes a apostar por la cultura de la meritocracia. “Nuestra esperanza está en el establecimiento de una institucionalidad que esclarezca las reglas de juego, privilegie la meritocracia, saque el dinero de la política e iguale las condiciones de competición, si logramos eso tendremos una democracia más incluyente para los jóvenes”, afirmó.
En su oportunidad, Pérez destacó que la participación es el principal elemento de la cultura electoral y llamó a los jóvenes a involucrarse en el proceso para producir cambios. Además denunció que existen brechas para ejercer la democracia y que muchas cosas no se logran porque “no tenemos consistencia en lo que como sociedad queremos”.
Desafíos de la juventud a lo interno de los partidos políticos fue la última intervención. Reyes abogó por la transparencia y la trasformación en los partidos y dijo que tiene como meta que “en el 2020 el congreso tenga una matrícula de 40 legisladores, menores de 35 años”.
La moción unánime de los tres expositores fue un llamado a la juventud a participar y a conquistar los espacios en todos los ámbitos, a prepararse y luchar por los escaños y desde allí provocar la transformación que el país necesita.
Cada intervención culminó con una sesión de preguntas y respuestas donde los asistentes también manifestaron sus opiniones. La inquietud más frecuente fue si ante una juventud preparada el país cuenta con las estructuras y las políticas públicas para desarrollar su potencial y ser tomados en cuenta.