El retrato de un hierático Che Guevara que el fotógrafo cubano Alberto Díaz “Korda” captó en La Habana después del triunfo de la Revolución pasó años desapercibido antes de convertirse en todo un icono. Este jueves la imagen más reproducida del mundo cumple seis décadas.
El 5 de marzo de 1960 el Che participaba en el funeral de las víctimas de la explosión de “La Coubre”, un barco llegado desde Bélgica a La Habana con armas y municiones para el nuevo Gobierno liderado por Fidel Castro, que consideró el suceso un sabotaje.
Korda (La Habana, 1928 – París, 2001) captó ahí la imagen del guerrillero -cuyo hieratismo atribuyó a la ira contenida por las pérdidas humanas y materiales- para publicarla en el hoy desaparecido diario “Revolución”, aunque sus editores la desecharon en la tirada del día siguiente.
OLVIDADA DURANTE AÑOS
La foto, titulada “Guerrillero Heroico”, permaneció colgada en la pared de Korda- “no era famosa entonces, en 1964 solo había una copia en el estudio”, explica a Efe José A. Figueroa, en aquel tiempo ayudante del artífice del retrato y hoy uno de los fotógrafos más reconocidos de Cuba.
De hecho no fue hasta 1967, tras la muerte del protagonista en Bolivia, que el editor italiano Giangiacomo Feltrinelli adquirió los derechos para publicar “El Diario del Che en Bolivia” y utilizó la imagen en un cartel que vendió dos millones de copias en seis meses.
“A medida que la foto se hizo más importante, más solicitada, siempre la imprimíamos en mi laboratorio”, asegura Figueroa, que ha estado casi tan ligado a esa imagen como su exsocio y amigo fallecido hace 19 años. UNA FOTO, DOS FOTOGRAMAS Algo que pocos saben es que Korda, al ver al Che destacarse entre el público durante el acto funerario, apretó el obturador dos veces.
«Él tomó dos fotogramas. Siempre se conoció uno solo y el otro nunca se imprimió porque había la cabeza de un hombre detrás”, explica Figueroa, que guarda una copia original de ambas imágenes, en las que la expresión del rostro del Che es casi idéntica.
Con motivo del 60 aniversario, hoy el fotógrafo cubano decidió divulgar por primera vez este desconocido ejemplar en la red social Instagram.
Seis décadas después de la famosa instantánea, el “Guerrillero Heroico” de Korda y las versiones de Jim Fitzpatrick y Andy Warhol todavía llenan paredes de dormitorios universitarios y son usadas en pancartas, camisetas, pegatinas y hasta en controvertidos anuncios publicitarios, como el del gigante automotriz Mercedes Benz en 2012.
En Cuba es difícil caminar sin toparse con la imagen, comercializada como mercancía turística y reproducida a gran escala en la Plaza de la Revolución, donde el expresidente de EE.UU. Barack Obama insistió en tomarse una foto con el “Guerrillero Heroico” de fondo durante su histórica visita a La Habana en marzo de 2016.
Uno de los escasos originales fue subastado en 2013 en Viena por más de 9.000 euros y en 2016 el hijo menor de Korda, Dante, vendió por 18.000 euros la cámara Leica con la que el artista tomó su imagen más icónica y documentó los primeros años de la Revolución Cubana.