La NASA ensaya con éxito aterrizaje de su cápsula con material del asteroide Bennu

La NASA ensaya con éxito aterrizaje de su cápsula con material del asteroide Bennu

La NASA ensayó con éxito este miércoles el aterrizaje de una cápsula de la misión OSIRIS-REx, que contendrá las muestras recogidas en el asteroide Bennu y proporcionará por primera vez al programa espacial de EE.UU. material procedente de ese tipo de cuerpos.

El equipo de la misión OSIRIS-REx realizó en el desierto de Utah un aterrizaje de prueba en preparación para la llegada de la misión el próximo 24 de septiembre, según explicaron expertos de la NASA en una conferencia de prensa virtual.

La cápsula de prueba fue lanzada desde un helicóptero y aterrizó en la zona designada en un centro de entrenamiento del Departamento de Defensa en el desierto cerca de la ciudad de Salt Lake City, en Utah, según informó la NASA.

La nave OSIRIS-REx despegó hacia el asteroide Bennu en 2016, recordó Melissa Morris, directora de este programa espacial.

«OSIRIS-Rex llegó a Bennu en 2018, donde comenzó un estudio de 18 meses de duración en la superficie del asteroide para elegir un sitio donde recolectar la muestra», relató.

Dos años después, en octubre de 2020, la nave comenzó su viaje de retorno a la Tierra, que culminará en tres semanas, cuando deje caer la cápsula con las muestras sobre el desierto de Utah.

«Se trata de la primera misión de EE.UU. que devuelve muestras recogidas de un asteroide que está más allá de la órbita de la Luna», subrayó la experta.

El aterrizaje de la cápsula no será nada fácil. Según contó Richard Burns, otro de los líderes de la misión, el equipo tomará la decisión de liberar la cápsula cuando la nave se encuentre a 10.7826 kilómetros de la Tierra.

«El área de aterrizaje mide unos 400 metros cuadrados. Es como lanzar un dardo de un lado a otro de un campo de baloncesto y esperar que caiga en el centro de una diana», destacó Burns.

Una vez las muestras recogidas por OSIRIS-REx estén en las manos de los científicos en la Tierra, explicó la NASA en un comunicado, pasarán a ser estudiadas durante «décadas» con el fin de analizar cómo se formó la Tierra y el sistema solar, al igual que el origen de los elementos orgánicos que llevaron a que se formara vida en nuestro planeta.

El asteroide Bennu, que fue descubierto en 1999, tiene una amplitud de medio kilómetro en su ecuador, se encuentra a una distancia orbital del Sol de 168 millones de kilómetros y cada seis años se acerca a la Tierra.