La cantante Rosalía es ya oficialmente materia de estudio universitario tras la presentación de la primera tesis doctoral en España que analiza su proceso creativo y que, como conclusiones, pone de relieve las influencias en su música de Enrique Morente y de Silvia Pérez Cruz, entre otros aspectos.
Fue hace cinco años cuando comenzó a prepararla su autor, el musicólogo y psicólogo Daniel Gómez Sánchez. De las 60 candidaturas que se presentaron entonces para el doctorado solo se admitieron una quincena, entre ellas, su tesis, que defendió este pasado viernes ante el tribunal de la Universidad Complutense de Madrid y que fue calificada con una nota de ‘sobresaliente’.
“En la Complutense fueron de alguna manera visionarios al darle importancia a una tesis sobre esta artista que, aunque entonces comenzaba a causar ya cierto interés, nadie pensaba que iba a eclosionar de este modo”, destaca a EFE Gómez Sánchez sobre un proyecto que hunde las raíces en el ecosistema de Rosalía en Barcelona, pero que se ha defendido en Madrid.
Colaborador de Tamaro Rojo en labores de dirección musical, con experiencia también en teatro musical en Madrid, cuenta este apasionado de las estructuras melódico-rítmicas, “el ADN de la creación de un artista”, que su interés por Rosalía arrancó de una manera muy casual.
“Un día, caminando por el centro de Madrid, vi una multitud de gente. Era el concierto que Rosalía celebró en plena plaza de Colón a finales de 2018, cuando presentaba ‘El mal querer’. Escuché de lejos ‘Malamente’ y me acerqué. No sonaba a nada que hubiese oído antes.
Era una propuesta muy novedosa que remezclaba el flamenco con las músicas urbanas y me quedé embelesado”, rememora. Recuerda haberle comentado a uno de sus profesores en el Grado de Musicología que aquella artista “iba a ser algo global” y aquel le animó a presentar una propuesta de tesis.
“En ella me pregunto cómo una chica que viene de un ambiente familiar sin músicos, ni tradición flamenca y desde Barcelona, consigue aprender todos esos códigos en un espacio de 8 años a nivel institucional, cuando el flamenco a menudo se ha transmitido oralmente”, señala Gómez Sánchez.
En su investigación, mantuvo contacto con la propia Rosalía, con otras figuras como María José Llergo y, sobre todo, con buena del entorno de la artista en el Taller de Músics de Barcelona donde se formó, incluido su fundador, Luis Cabrera, y descubrió las múltiples vinculaciones del centro con Enrique Morente. “Morente es un maestro indirecto de Rosalía, aunque no lo llegó a conocer.
En toda su música hay una impronta muy importante de esa libertad de creación y experimentación a partir de un conocimiento, de la exploración tímbrica con la que el cantaor llevaba su voz a lugares límite, incluso en el uso de samples”, subraya.
La otra pata importante de la tesis tiene que ver con Silvia Pérez Cruz, con “su conexión en la manera de colocar la voz o el vibrato rápido”, en parte a través del que fuera profesor de Rosalía tanto en el Taller de Músics como en la ESMUC, José Miguel Vizcaya, alias Chiqui de la línea, quien había impartido antes una asignatura a la exintegrante de Las Migas.
“Hubo un concierto de Silvia Pérez Cruz tras el que Rosalía se le acercó y le dijo- ‘Yo aprendí a cantar piano imitándote’”, apunta Gómez Sánchez sobre el origen de lo que considera una de las grandes fortalezas de la artista- “Ejecutar melismas complejos en un volumen suave».
Añade que ambas, que trabajaron con el mismo productor, Raül Fernández ‘Refree’, también comparten buena parte de un ecosistema de músicos con origen en Cataluña, “una familia musical con una formación muy parecida que constituye toda una nueva generación de artistas” y que, en su opinión, ayudó a crecer a Rosalía en su discurso creativo.