La inflación de mayo de 8.6% fue la más alta en Estados Unidos en los últimos cuarenta años, y como se trasladó, vía efectos de segunda ronda, al resto de bienes y servicios y a los salarios, la prioridad de la Reserva Federal es reducirla y lograr que converja al 2% en medición interanual.
Explica el fuerte girón de timón de la semana pasada, para situarlas entre 1.5% y 1.75% subió las tasas de interés en 0.75%, el mayor aumento desde noviembre 1994, con expectativas de nuevas alzas a partir de julio, agrego yo, hasta alcanzar una tasa neutral que nadie conoce y se define como la que no da impulso a la economía, pero tampoco la deprime, un equilibrio difícil conseguir.
El riesgo es que buscándola trepe un nivel que genere recesión y continúe la inflación, que los capitales regresen a Estados Unidos y las presiones devaluatorias dispare la prima de riesgo en economías muy endeudadas, esto es, la diferencia en costo del dinero, entre el que exigen los mercados y el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años.
No es el caso de nuestra economía, porque creciendo alrededor de su potencial, con un mercado laboral que ha recuperado en tiempo récord el empleo que perdió durante la pandemia, con el peso desempeñándose mejor que cualquier otra moneda en la región, respaldado por reservas internacionales (US$7,018.6 millones) que duplican el nivel que existía en agosto 2020, está preparada para resistir los brutales choques de costos externos y la restrictiva política monetaria estadounidense.
Por esas razones, los inversores no dudan que el Banco Central mantendrá inalterable el importante diferencial de tasas de rendimiento de la economía dominicana frente a la estadounidense, que bajará la inflación hasta que converja con la meta de 4%, consciente de que no podemos permitirnos el lujo de dejar de crecer.
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Saben, además que, mucho antes de finalizar el 2021, la Entidad Emisora inició su propio ciclo de aumento de su tasa de referencia, elevándola en cinco ocasiones, acumulando 350 puntos básicos, de 3% a final de octubre 2021 a 6.50% en la actualidad,
Que las medidas preservaron el valor del peso frente al dólar, evitaron devaluaciones que aumentara la inflación importada, y crearon las condiciones para reducir en más de 80 mil millones de pesos los depósitos overnight de los bancos comerciales en el Banco Central.
Explico esto último, de octubre 2021 a la fecha el Banco Central subió de 3.00% a 7.00% anual el costo de la facilidad de liquidez a los bancos comerciales, y de 2.50% a 6.00% el interés con el que remunera el exceso de liquidez (depósitos overnight), y por mecanismo de transmisión aumento el tipo de mercado interbancario diario overnight en 256 puntos básicos, de 4.09% a 6.65 por ciento anual.
Movimientos de tasas de interés que redujeron el costo de oportunidad del dinero para los bancos comerciales. Me refiero al diferencial entre la tasa interbancaria y de depósito en el Banco Central, de 1.59% (4.09% – 2.50%) en octubre de 2021 a 0.65% (6.65% – 6,00%) en la actualidad, explicando la mencionada disminución de los depósitos overnight en el Banco Central en más de 80 mil millones de pesos.