El secretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo (dch), y la canciller alemana Angela Merkel se antes de la delcaración conjunta en la sede de la cancillería en Berlín (Alemania) este viernes. El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, advirtió este viernes a sus socios europeos de que cambiará su "conducta" con respecto a la información que comparte con ellos si no toman medidas contra el gigante tecnológico chino Huawei.EFE/ Sean Gallup/POOL
Berlín- La visita a Berlín del secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, ha reflejado hoy las crecientes diferencias entre dos socios tradicionalmente cercanos, que acumulan ahora desencuentros en comercio exterior, Irán, Huawei, Venezuela, la OTAN y la lucha contra el cambio climático.
Pompeo, al reunirse con la canciller, Angela Merkel, y su ministro de Exteriores, Heiko Maas, no dudó en señalar las diferencias e incluso lanzó alguna advertencia, mientras sus anfitriones trataban de relativizar las grietas en la “relación transatlántica”, un concepto fetiche venerado durante décadas en Berlín.
“Estados Unidos es y sigue siendo el primer socio de Alemania fuera de la Unión Europea”, subrayó Merkel en una breve comparecencia ante los medios junto a Pompeo en la que reivindicó la necesidad de coordinarse.
En la rueda de prensa que el representante estadounidense mantuvo con Maas, el ministro alemán buscó asimismo la conciliación cuando argumentó que Berlín y Washington tienen “los mismos objetivos” en la cuestión iraní, pues ambos quieren impedir que Teherán obtenga armas nucleares, aunque por “distintas vías».
Después de que EEUU abandonase el acuerdo nuclear iraní alegando incumplimientos y aplicase nuevas sanciones contra Teherán, Europa decidió mantener con vida el pacto pese a las dificultades.
Sólo en “estrecha cooperación” se pueden solucionar los grandes problemas geopolíticos actuales, consideró el ministro alemán de Exteriores. Pompeo dejó entrever las distintas aproximaciones de ambos a la crisis venezolana, pese a la apuesta final común por la vuelta de la democracia.
No obstante, se centró en las diferencias en torno a la relación con Irán -sobre el que Estados Unidos quiere elevar la presión- y con el gigante tecnológico chino Huawei.
El secretario de Estado advirtió a sus socios europeos de que si confían sus redes 5G de transmisión de datos a la empresa china, Washington podría restringir la información que comparte con ellos.