Por qué rememorar a Consuelo Montalvo de Frías en esta Navidad? Es que justo en estos días, diciembre de 1923, organizaba a las maestras normales, amas de casa, farmacéuticas, mujeres profesionales y oficinistas, para la tarde navideña y de epifanía que llevaría alegrías, regalos y dulces a la niñez desvalida de San Pedro de Macorís.

Las acciones realizadas en la velada navideña las relata en el artículo “Fémina y los niños pobres”, que publica el 15 de enero de 1924, en la revista que hasta 1932 sustentaba junto a Petronila Angélica Gómez Brea; detallando cada uno de los momentos en los cuales niños y niñas recibían sus regalos, zapatitos y algunas prendas de vestir.

Esta labor altruista y caritativa la acentúa con una intención organizativa y política: formar un movimiento de mujeres, más extenso y comprometido con la niñez; así escribe: “Abrigo la esperanza de que para el año que viene se haya instituido una liga femínea para que siendo mayor el número de las damas encargadas de esta noble misión, pueda efectuarse la distribución de regalos, hogar por hogar”.

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Consuelo Montalvo de Frías, quien firma sus poemas con seudónimo de Magnolia, comienza su labor en la revista Fémina el 15 de julio de 1922, convirtiéndose en jefa de redacción de la revista.

En un continuo activismo a favor de los derechos civiles y políticos de las dominicanas, escribe 24 artículos en defensa de la causa de la ciudadanía de las mujeres y del feminismo comprometido, de los cuales, emanan las frases que compartimos.

Es, además, la más abanderada de un feminismo espiritual y del hogar. En primera instancia, ascendió la labor de la mujer al estudiar la labor “medianera” de la Virgen de la Altagracia, escribir sobre la participación de las dominicanas en los templos y organizar acciones caritativas. Y, al relatar sus aspiraciones de ciudadanía desde su casa, comprende y compromete este espacio como el garante de la obra emancipadora de la mujer; vindica, para todos igualdad, armonía y equidad.

Nótese, además, que así como organiza el ágape para niños y niñas, en 1924, fue justo en ese año en el cual realiza una de las subversiones más sublimes y ejemplares al dar apertura al concurso de «Bigotes Perfectos» (el 15 de junio), con la finalidad de combatir el orden militar impuesto por la intervención estadounidense en la República Dominicana, rescatando, como huella de identidad masculina dominicana, la moda del mostacho, puesto que las tropas interventoras la habían prohibido desde 1916.

LABOR PERSUASIVA DEL FEMINISMO GÉNESIS

“Iremos infiltrando sutilmente en el ánimo de nuestras jóvenes madres, nuestra modeladora doctrina feminista, a fin de que, inculcadas en el hogar las primeras máximas, formen la base de una educación más eficiente para las mujeres que la regida hasta hoy en la sociedad dominicana”.
“Perfeccionando el hogar”

PRENSA EMANCIPADORA

“La mujer dominicana, dotada de elevadas aspiraciones, ha soñado crearse un sitio de preferencia en el mundo de las letras, y da empuje a este pensamiento, lanzándose al árido campo del periodismo, para expandir su espíritu sediento de saber”.

“NUEVO HORIZONTE”

HOGAR, ESPACIO PRIVADO. “Desde la tranquila sombra de mi apacible hogar, atisbo, tras mi claro lente las cosas de palpitante interés de la mujer que ocurren en nuestra sociedad, a pesar de que mis deberes de madre y esposa me impiden saborear de cerca tal o cual asunto de actualidad”.
“Algo sobre las modas”

FEMINISMO Y HOGAR

“Cuando con igual balanza pese en la sociedad los derechos de ambos sexos, hallaremos entonces que la mujer compañera del hombre, será más sincera para el digno elegido que, no ejerciendo presión sobre ella, podrá estudiarla y conocerla… ¡Feliz el hogar donde solo imperen la fuerza de la ternura y la esclavitud del deber!”.
“El congreso feminista”

FEMINISMO MODERNO

“Nuestro feminismo moderno, íntimamente ligado a la ética social, completamente consagrado al perfeccionamiento del hogar dominicano, por medio de la cultura de la mujer, que es la edificadora y por lo tanto el primer factor de este, ha buscado siempre su engrandecimiento al propio tiempo que defiende sus derechos”.

“Laborando”

RECHOS CIVILES

“Hacemos periodismo para que las generaciones venideras de féminas disfruten del indiscutiblemente bien de los derechos civiles de la que es llamada a desempeñar los importantes papeles de hija, esposa, ciudadana y madre”.
“Laborando”

PLUMA DE MUJER

“Mi pluma, con la esencia de su alma de mujer, siempre está dispuesta a mantener la bandera inmaculada en la cumbre ideal feminista”.

“La mujer y su evolución”

REFORMAS PARA LA CIUDADANÍA

“Y ya la mujer moderna, saliéndose de los viejos moldes, sacude el yugo que le oprime a su delicada garganta y, sin dejar incumplidos sus múltiples deberes se irgue majestuosa ante la injusticia de las leyes que la desconocen y anulan sus derechos. Y no descansará en su tenaz empeño hasta no haber conquistado por completo el perfeccionamiento de su hogar que ama y cuya cristalización vislumbra en las radiantes claridades del porvenir, que es suyo, pésele lo que le pese. La reforma social que conlleva el reconocimiento de los derechos de la mujer, en nada pueden afectar su delicadeza, porque esa reforma (que podamos votar) es hija legítima del cerebro bien desarrollado de un grupo de damas bien inspiradas en pro de la colectividad, no es obra, pues, de un egoísmo ilimitado en ansias del bien propio únicamente”.

“La mujer y su evolución”

RESILIENCIA POR LA CAUSA

«Ya sabéis que hace diez largos años que vengo laborando por esta causa que amo, y que inicié mis actividades feministas con una serie de editoriales insertos en la revista Fémina, de la cual fui fundadora. A través de este lapso, y en más de una ocasión, el desengaño ha tocado a las puertas de mi alma soñadora, mas no por esto he sentido el dolor del cansancio, ni el desaliento”.

“Palabras de la señora Consuelo Montalvo de Frías, subdirectora de la junta provincial AFD en el acto de celebración del primer aniversario”

OPRESIÓN

«Vivían los hombres dominicanos, acostumbrados a mirar en nosotras las mansas ovejas, dispuestas a acatar en todo tiempo sus órdenes aun cuando con esto no nos llevásemos de encuentro nuestra felicidad, y la de nuestros hijos y nuestras hijas, y tal vez la de ellos mismos, porque en los hogares faltaba la armonía que establece la confianza y la libertad individual, y el amor y la tranquilidad caminaban por incierto derrotero, con rumbo al fracaso. Empero, una voz gritó desde lo alto: ¡Despierta! Y nosotras, las dignas hijas de la heroica Trinidad, no podíamos desoír esa voz que nos invitaba a romper las cadenas de tan desdorosa esclavitud. (…) Así nació el feminismo en Santo Domingo porque la rebeldía es hija legítima de la opresión”.