Uno de los puntos de mayor coincidencia en el sistema social del deporte en las sociedades avanzadas en el mundo contemporáneo, lo constituye el criterio de que ya no es concebible el desarrollo de esa popular actividad sin que se haya desarrollado al mismo tiempo un denso sistema de instalaciones y equipamientos deportivos en las que cada vez más amplios segmentos de la población puedan integrarse.

Probablemente el reto más difícil que tuvieron que afrontar las autoridades del Ministerio de Deportes, desde el principio de la actual administración, fue el rescate del conjunto de instalaciones y complejos en las distintas regiones del país que se encontraban en franco estado de deterioro durante un largo tiempo de abandono y la falta de mantenimiento.

En menos de dos años de gestión, el brumoso panorama experimentó un impresionante cambio hacia la luz, gracias al exitoso Plan de Recuperación de Instalaciones Deportivas y Complejos, puesto en vigor a escala nacional, con el fin de brindarle un eficiente servicio a los usuarios y al público en general.

Los trabajos de reparación interior y exterior de los principales escenarios para la práctica de la actividad deportiva que se encontraban abandonados y arrabalizados, hoy día presentan una atractiva imagen de higiene, seguridad y belleza, merecedora de los mejores elogios de los medios de comunicación masivos.

Un aspecto que merece resaltarse es la supervisión de las labores que encabeza personalmente el titular de Deportes, Jaime David Fernández Mirabal, mediante recorridos y visitas que realiza a las diversas localidades.

Los frutos del ambicioso plan se pueden apreciar en el remozamiento de los grandes complejos como el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte, en el Distrito Nacional, el Parque del Este en la Provincia de Santo Domingo y La Barranquita en la ciudad de Santiago.

Las labores de recuperación y mantenimiento han incluido los complejos deportivos donde se han celebrado las distintas ediciones de los Juegos Deportivos Nacionales, como La Vega, San Francisco de Macorís, Moca, San Pedro de Macorís, Barahona, La Romana, Mao y Monte Plata.

Los multiusos, las instalaciones elementales y las canchas abiertas han sido objeto de importantes mejoras en los renglones de pintura, electrificación, plomería, reparación de tabloncillos y colocación de tableros. Estas faenas han estado bajo responsabilidad de la Dirección de Instalaciones Deportivas, a cargo del experimentado ingeniero Ramón Salcedo, quien además dispone de un personal especializado en el acondicionamiento de áreas verdes.

Entre las acciones se cuenta la habilitación de las instalaciones para el montaje de eventos internacionales como ocurrió con ocasión del Pre-Mundial de Voleibol Femenino, celebrado recientemente en La Romana, así como el Torneo Panamericano de Pesas que tuvo efecto en el Parque del Este.

También hay que resaltar los trabajos en los parques abandonados que han sido convertidos en espacios deportivos y ambientales, como sucedió donde quedaba el aeropuerto viejo de Santiago, que se ha erigido en un parque con doce instalaciones.

El Parque del Este, que originalmente fue concebido para la alta competición, donde había una vieja piscina en desuso, se instaló una cancha de fútbol de arena oficial y cuatro canchas de voleibol de arena recreativa.

En procura de viabilizar el empinado propósito el organismo deportivo, aparte de priorizar los recursos propios, firmó acuerdos con empresas privadas, ayuntamientos y otras instituciones públicas, como los Ministerios de Medio Ambiente, Turismo y Cultura. Están por concretarse acuerdos con la cartera de Obras Públicas y la Oficina Supervisora de Obras del Estado.

Haciendo un balance de los resultados y cobertura del Plan de Recuperación de Instalaciones y Complejos Deportivos, desde ahora se perfila como uno de los logros más grandiosos de cualquier gestión que haya pasado por el principal organismo deportivo del Estado.