No es que vamos a tratar sobre la obra de Ortega y Gasset “La rebelión de las masas” sino que hemos visto como en el presente año la mayoría ha querido levantarse para exigir puestos en la dirección que comanda la mayoría en el fútbol mundial.
Primero fueron los fanáticos ingleses que se levantaron en pie de lucha para exigir que “sus clubes” desistieran de participar en la Superliga que ha querido inventar el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.
Ahora, la FIFA con su presidente a la cabeza, Gianni Infantino, ha querido imponer la celebración de un Mundial cada dos años, lo que ha recibido el rechazo de varias federaciones nacionales, y ahora han sido los fanáticos y los jugadores los que han levantado su voz en contra del proyecto, además de varias ligas europeas.
Las ligas, el sindicato mundial de futbolistas y las agrupaciones de aficionados se han unido para exigir su participación en el gobierno del fútbol. Se celebró una reunión en Bruselas, y allí se han expresado. “Necesitamos un órgano en donde todas las partes interesadas podamos acordar el futuro del fútbol”, señala Mathieu Moreuil, quien fue el delegado de la Premier League.
Mientras que el presidente del sindicato mundial de jugadores, Jonas Baer Hoffmann, dijo que “en el transcurso de cinco meses hemos asistido a la presentación de una Superliga y un Mundial cada dos años”.
También estuvieron presentes las confederaciones de fanáticos, y entre todos propusieron la realización de un cambio radical en el gobierno del fútbol. Lo hicieron mediante la publicación de un manifiesto.
Vislumbramos grandes cambios en el fútbol.