He sostenido la tesis de que, los problemas que gravitan en Latinoamérica aun en pleno siglo XXI; son el resultado del trastoque de sus independencias. Toda vez que, en la gran mayoría de estos países figuras del bagaje ideológico de Martí, Dessalines, Duarte, San Martín, O’Higgins, Carrera, Bonifácio, Fábrega y muchos otros, conocedores e intérpretes de las teorías de los enciclopedistas del siglo XVIII; fueron quienes promovieron las luchas emancipadoras del continente. Y, salvo algunas excepciones, los mismos no fueron quienes gobernaron ni construyeron el modelo de desarrollo enarbolado por Bolívar. Sino, que fueron caudillos, absolutistas y megalómanos del poder.
Las 4 Etapas de América Latina.
Desde la invasión, saqueo, genocidio y evangelización del mal llamado descubrimiento de América, el territorio latinoamericano jugó un papel fundamental en la consolidación de las potencias europeas, en la construcción del gran imperio estadounidense y, ahora en la expansión estratégica de la potencia China. Ese rol histórico de víctima imperial, ha estado predefinido por la coyuntura política internacional 1ro, de saqueo colonial desde 1493 hasta 1823. 2do, de expansión estratégica desde la doctrina Monroe hasta la Segunda Guerra Mundial. 3ro, de pivote ideológico desde la revolución cubana hasta la caída de la URSS y, 4ta, de guerra fría estratégica desde el año 2001 entre China y EE.UU.
Dentro de ese contexto, en la 1ra etapa España, Francia, Países Bajos, Inglaterra y Portugal; “abrieron las venas de América Latina” como estableció el gran Eduardo Galeano. De igual forma, desde el funesto tratado de Guadalupe Hidalgo se operacionalizó la doctrina Monroe y se rompió con la política de doble vía. En efecto, EE.UU. comenzó aplicar el Big stick diplomacy fundamentado en intervenciones, intereses económicos y la ocupación de zonas estratégicas como fueron los casos de Nicaragua, el canal de Panamá y las Bananas wars. Asimismo, en la 3ra etapa Latinoamérica se convirtió en frontera imperial, en cuna ideológica del comunismo y el antiamericanismo contrarrestado con la política del dollar diplomacy.
Fuente de Recursos del Siglo XXI.
Desde que llegó Cristóbal Ladrón, los recursos que subyacen en la región han sido el origen de sus virtudes y desgracias. Por tal razón, es muy probable que solo el “gran tablero mundial” que es Eurasia como la describió el preclaro politólogo estadounidense Zbigniew Brzezinski, haya tenido que sufrir los embates de tantos imperios con el objetivo de apoderarse de sus recursos geoestratégicos; como fueron, el oro, plata, azúcar, guano, níquel, algodón, etc. Sin embargo, con la irrupción vertiginosa de China en la región se pone en evidencia el advenimiento de una nueva guerra fría; ahora por los recursos del siglo XXI que una buena parte de ellos están en Latinoamérica.
Desde esa perspectiva, por la interdependencia económica del sociólogo Immanuel Wallerstein, el 1er recurso de América Latina son los más de 600 millones de habitantes que necesitan materias primas que producen las potencias. Tiene el 85% de todo el litio del planeta con el que se fabrican naves espaciales, submarinos y aplicaciones nucleares etc. Es la región de mayor importancia en la producción de oro. Tiene la reserva de petróleo más grande del mundo. Tiene reservas de coltán con el que se fabrican los aparatos electrónicos de última generación, de las mayores reservas de agua dulce, el canal más importante de américa y la reserva más grande de flora del mundo; con la que se hacen los medicamentos más costosos, etc.
La Geoestratégica Nueva Guerra Fría.
Se vendió una exagerada y equivocada idea propia de la mitología griega, de que los latinoamericanos tenemos una inexpugnable dependencia de los EE.UU. Empero, ellos mismos nos enseñaron que “no existen los amigos ni enemigos eternos sino; solo intereses”. En virtud de ello, después de la caída de la URSS y con el 11/9 los EE.UU. cuasi-abandonaron su política exterior hacia América Latina. Con el agravante, de que ese mismo proceso coincidió con el auge de gobiernos progresistas en la región. Por eso, China aprovechó el escenario e hizo un eclecticismo tripartito en la región, con las doctrinas de Deng Xiaoping, Jiang Zemin y Xi Jinping.
En ese sentido, hoy Latinoamérica es pivote fundamental de la geopolítica del siglo XXI. Por ello, China informó en la reunión China-Celac que para 2025 habrá invertido en la región 500,000 millones de dólares. De igual forma, desde los tratados Mallarino-Bidlack, Clayton-Bulwer y el Hay-Pauncefote Centroamérica es el espacio de transición de mayor importancia de todo el hemisferio occidental. Motivo por el cual, es el apéndice natural de la Nueva Ruta de la Seda en la región y, espacio vital para la seguridad y la economía marítima e interoceánica de los Estados Unidos. No olvidemos el llamado a consulta urgente con sus embajadores de la zona y su férrea lucha por Venezuela y Nicaragua.