El catedrático Lorenzo Vargas (Lenchy), candidato a la Vicerrectoría de Extensión de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), planteó como prioritario que los profesores de la academia puedan disfrutar de un salario digno, un contrato laboral de 20 créditos máximo y de actualización permanente con postgrado.

Al hacer el planteamiento, como parte de su visión sobre la UASD, Vargas afirmó que estas son condiciones básicas para alcanzar resultados de excelencia académica y en la calidad de los procesos formativos de los profesionales egresados.

Dijo que, a propósito de la visita que hizo el presidente Luis Abinader a esa academia, se debería plantear al Gobierno un programa concreto sobre cómo mejorar la calidad de vida de los profesores, de manera que puedan actualizarse, investigar para hacer grandes aportes al Estado y al país en general y a mejorar la capacitación y la calidad académica de los futuros profesionales.

Deploró el estrés sistemático, y la ansiedad a que están expuestos los profesores universitarios en las aulas, con una población de hasta 60 y 70 estudiantes presenciales, con sobrecarga de alumnos aún en la modalidad de clases virtuales, impartiendo entre 50 y 60 horas semanales de cátedras, agravado por los salarios insuficientes que devengan, factores que les impiden tiempo para un ocio saludable y deterioran su estado físico y mental, llevándoles hasta la muerte en una frecuencia preocupante

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“Entonces, aquí hay que prestar atención a cosas de fondo de la UASD, como es el reordenamiento de los criterios con los cuales se designa la docencia, como se hacen los contratos laborales, de manera que un profesor no pueda trabajar en aula más de 20 horas a la semana”, propuso.

Consideró insólito que la UASD sea la única universidad del mundo donde un profesor trabaje como si fuera un obrero no calificado, lo cual no le permita tener tiempo para actualizarse y ni siquiera para leer un periódico.

Manifestó que en la UASD ha habido un desborde de esa situación en desmedro de la calidad en las condiciones de vida de los profesores y de los procesos de formación de los profesionales.

“Aquí lo fundamental es la calidad del trabajo, la calidad del proceso mediante el cual se forman los estudiantes, y al mismo tiempo la calidad de vida del maestro. Esta es la clave”, enfatizó Lenchy Vargas.

“No puede haber calidad docente en la UASD, cuando la calidad de vida de los profesores está por el suelo, dado que no reciben los estipendios que les corresponden”, proclamó, al tiempo de proponer que un catedrático debería ganar como mínimo 200 mil pesos mensual, como devengan muchos profesionales a nivel del Estado y del sector privado.

Rol de la extensión

Explicó que la Vicerrectoría de Extensión es el canal de comunicación de la UASD con el pueblo, con el Estado y las organizaciones de la sociedad, llevando sus conocimientos y capacidades profesionales y recogiendo, mediante el diálogo, los reclamos y planteamientos de los distintos sectores, para mediante análisis profundos e investigaciones rigurosas elaborar proyectos, planes y programas que contribuyan a un mejor y mayor desarrollo social, político y económico del país.

En definitiva, dijo que la extensión no es un concepto nuevo ni propio de la UASD. Es una política sustantiva de la academia que juega un papel clave en el desempeño de la institución para ayudar a solventar y resolver los problemas fundamentales que inciden en el desarrollo de la sociedad.

“Es decir, la UASD debe desarrollar una interrelación, una sinergia, en la que tanto lleva a la sociedad como recibe, para contribuir a impulsar programas de equidad y de desarrollo social sostenible”, sostuvo el profesor universitario.

En aspecto electoral, Vargas, quien en su época de estudiante, fue presidente de la Federación de Estudiantes Dominicanos (FED) luego de alcanzar una de las más altas votaciones en las elecciones estudiantiles, destacó el buen ritmo de su candidatura y el apoyo permanente que recibe de los catedráticos universitarios que se identifican con su visión y conceptos sobre la UASD.

Abogó por una alianza programática de los aspirantes a la rectoría y demás cargos que se postulan para las próximas elecciones de junio venidero.