El presidente de la Fuerza del Pueblo (FP), Leonel Fernández, reiteró anoche que en los actuales momentos una reforma a la Constitución es innecesaria e inoportuna, porque la atención de la sociedad está en la supervivencia ante la crisis que afecta la nación.

Al ser entrevistado por el periodista Roberto Cavada, en el noticiario Telenoticias, que es transmitido por el Canal 11, el exmandatario señaló además que el Consejo Económico y Social (CES) no tiene competencia para conocer ninguna propuesta de reforma constitucional.

Fernández indicó que la competencia constitucional del CES es solo para conocer aspecto s relativos al diálogo económico, social y laboral.

“Lo dice textual nuestra Carta Magna, que el Consejo Económico y Social es entre empleadores y trabajadores, para discutir políticas laborales y sociales. De manera que una propuesta de reforma no debe ser conocida en ese órgano constitucional”, explicó Fernández.

El dirigente político dijo que reconoce que el Gobierno busca consenso para esas reformas, pero entiende debe buscar otro escenario, porque la Constitución no establece esa prerrogativa para el CES.

Distorsión institucional

Fernández dijo que el Gobierno maneja de forma distorsionada las instituciones democráticas del país, ya que la propuesta de reforma laboral, que se debería estar conociendo el Consejo Económico, es discutida por el Ministerio de Trabajo.

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Sobre la inflación

Por otro lado, Leonel Fernández dijo que la inflación que afecta al país es muy grave y que incide de forma significativa en todos los sectores de la sociedad, en especial en las comunidades más pobres.

“A consecuencia de la inflación han incrementados los productos esenciales como el gas de cocinar, el pollo, la carne de res, el pan, el salami. Todo a subido en el país”, expresó Fernández.

Manifestó que las políticas de protección social anunciada por el presidente Abinader, entre las que incluye aumentar los beneficiarios de la tarjeta Supérate, muestran que la pobreza ha aumentado.

El expresidente deploró que el Gobierno haya hecho desaparecer del léxico político la palabra crisis, lo que en su opinión busca dar la impresión de que todo está bien, “cuando en realidad la gente pasa hambre”.

Afirmó que Abinader debe reconocer que hay una crisis real y no proclamar que el país está lleno de bondades, que es referente para el mundo, para generar una creencia de bondad que no existe.