El 23 de octubre de 1997, el filántropo y humanista Ulrick Gaillard, su compañera Virtudes Berroa y amigos entrañables como Reymond Therthulien, notable oncólogo, fundaron en los Estados Unidos la organización humanitaria Batey Relieve Alliance y su homóloga Bra Dominicana para apoyar las comunidades más pobres del país.
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Entonces, estudiantes extranjeros venían a la República Dominicana a conocer las condiciones de vida de los bateyes y sus manifestaciones culturales. Gaillard fue uno de esos jóvenes. Recién graduado de doctor en Derecho en la Universidad Roger Williams, vino con idea de escribir un libro, sin embargo, la miseria humana y social que contempló impactó su corazón. Conocer los bateyes lo movió a la acción para que esos enclaves habitados por gente trabajadora desamparada y en indignas condiciones tuvieran un apoyo solidario que les abriera el camino a la esperanza. Gaillard organizó un primer operativo de medicina general, dental y oftalmológica en 1998 con médicos y especialistas estadounidenses, canadienses y dominicanos, para atender a los braceros, bueyeros y enfermas que habían perdido la visión, tenían lesiones y secuelas derivadas del trabajo de la caña. En sus 25 años, Bra Dominicana ha beneficiado más de 4.5 millones de pobres y ha impactado positivamente localidades fronterizas, bateyes y campos en RD, Haití y Perú.