Por Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo- SODONUCLIM/@sodonuclim
El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo y su popularidad va más allá de su sabor y aroma reconfortante. A medida que avanza la investigación científica, se han revelado numerosos beneficios asociados con el consumo moderado de café, que van desde mejoras en la salud física hasta impactos positivos en el bienestar mental.
Uno de los beneficios más destacados del café es su capacidad para aumentar la alerta y la concentración. Gracias a la cafeína, un estimulante natural, puede mejorar el rendimiento cognitivo, lo que resulta especialmente útil en momentos de fatiga o falta de sueño. Varios estudios han demostrado que el consumo de café puede mejorar la memoria a corto plazo y la atención.
También se asocia con un menor riesgo de padecer de enfermedad de Parkinson, función cognitiva mejorada, menor incidencia de enfermedad de Alzheimer y en reducción riesgo de desarrollar esclerosis múltiple.
El café también tiene propiedades antioxidantes los cuales ayudan a combatir el daño causado por los radicales libres en el cuerpo pudiendo reducir el riesgo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer (endometrio, hígado, cabeza, cuello, colorrectal y mama). Esto se debe en parte a que el café puede mejorar la sensibilidad a la insulina y la función metabólica.
Otro beneficio es su efecto en el estado de ánimo. Varios estudios han encontrado que las personas que consumen café regularmente tienen un menor riesgo de depresión y, en algunos casos, menores tasas de suicidio. Puede estimular la producción de neurotransmisores como la dopamina y la serotonina, esenciales para mantener un estado emocional equilibrado.
Una revisión bibliográfica mostró que personas que tomaban 3-4 tazas de café al día tenían el menor riesgo de “mortalidad por todas causas” (muerte por cualquier causa).
Tener en cuenta que el consumo de café debe ser moderado. Un exceso de cafeína puede llevar a efectos adversos como insomnio, ansiedad y palpitaciones. La recomendación general es limitar el consumo a 3-4 tazas al día, dependiendo de la tolerancia individual (bio-individualidad).
El café también puede ser una experiencia social. Compartir una taza de café con amigos o familiares puede fomentar la conexión y mejorar la calidad de las relaciones personales. En muchas culturas, la pausa para el café es un ritual que invita a la conversación y la camaradería.
Recordemos la recomendación del ministro de Salud Pública, el Doctor Víctor Atallah, ¡no agregar azúcar! De hecho, se cree que agregar leche, crema, azúcares o edulcorantes, además de agregar calorías, puede anular sus propiedades beneficiosas. Esta columna educativa es presentada por la Sociedad Dominicana de Nutrición Clínica y Metabolismo. Escribe tus preguntas a: articulos@sodonuclim.org o @sodonuclim