La serie de Netflix “Monsters”, dirigida por Ryan Murphy, ha causado controversia entre los Menéndez. (Crédito: Netflix)
Lyle y Erik Menendez han expresado su descontento con el retrato que hace la serie “Monsters” de su historia, señalando inexactitudes y reviviendo un pasado doloroso
Los hermanos Lyle y Erik Menéndez han vuelto a ser el centro de atención mediática tras la reciente controversia generada por la serie Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menendez dirigida por Ryan Murphy y disponible en Netflix. La serie, parte de una antología centrada en crímenes reales, explora los impactantes asesinatos de José y Kitty Menéndez a manos de sus propios hijos en 1989, un caso que cautivó a la nación y que sigue generando fascinación y debate más de tres décadas después.
Desde la prisión, donde ambos cumplen cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, Erik Menéndez expresó su frustración y enojo por cómo la serie retrata tanto a él como a su hermano, de acuerdo a información publicada en el sitio People. En un comunicado compartido por su esposa, Tammi Saccoman, Erik criticó duramente el enfoque de la producción: “Es profundamente desalentador ver cómo Ryan Murphy ha elegido perpetuar mentiras dañinas sobre nuestras vidas”, afirmó. Según Erik, la serie simplifica y distorsiona su historia, reviviendo antiguos estereotipos y malentendidos sobre el abuso infantil y la violencia familiar.
La producción ha causado una división clara entre los seguidores del true crime. Mientras algunos elogian la serie por su estilo dramático y su impacto emocional, los Menéndez argumentan que se ha sacrificado la verdad por el sensacionalismo. Los hermanos han sostenido durante mucho tiempo que los asesinatos de sus padres no fueron un acto de simple codicia, como la fiscalía argumentó durante el juicio, sino una respuesta desesperada después de años de abuso físico, emocional y sexual a manos de su padre, José Menéndez.
“El abuso no se puede borrar ni simplificar”, explicó Erik en su comunicado. Los Menéndez han luchado durante décadas para que su versión de los eventos sea escuchada, y creen que producciones como Monsters dificultan ese proceso. La serie, según ellos, minimiza los abusos que sufrieron y presenta una imagen distorsionada de su padre, retratándolo como un hombre de negocios respetado en lugar de la figura abusiva que describen los hermanos.
“El abuso no se puede borrar ni simplificar”, explicó Erik en su comunicado. Los Menéndez han luchado durante décadas para que su versión de los eventos sea escuchada, y creen que producciones como Monsters dificultan ese proceso. La serie, según ellos, minimiza los abusos que sufrieron y presenta una imagen distorsionada de su padre, retratándolo como un hombre de negocios respetado en lugar de la figura abusiva que describen los hermanos.
“El abuso no se puede borrar ni simplificar”, explicó Erik en su comunicado. Los Menéndez han luchado durante décadas para que su versión de los eventos sea escuchada, y creen que producciones como Monsters dificultan ese proceso. La serie, según ellos, minimiza los abusos que sufrieron y presenta una imagen distorsionada de su padre, retratándolo como un hombre de negocios respetado en lugar de la figura abusiva que describen los hermanos.
Mientras tanto, Netflix ha defendido la serie, argumentando que está basada en hechos documentados del juicio y que su objetivo es explorar la complejidad de los casos criminales. Sin embargo, para los Menéndez, el problema radica en cómo se cuentan esos hechos. “No se trata solo de mostrar lo que ocurrió, sino de cómo se enmarca y qué se omite”, explicó Erik. Para ellos, la verdad ha sido sacrificada en favor de una narrativa que busca más el impacto que la comprensión.
La serie ha generado un renovado interés en el caso Menéndez, y aunque algunos argumentan que esto puede abrir nuevas discusiones sobre el abuso infantil y la justicia, los hermanos siguen sintiendo que, en última instancia, su historia ha sido explotada una vez más por los medios.