Primitivo Cadete 
Luis Pie (izquierda) durante una de sus participaciones en competencias internacionales.
Confiesa que en sus inicios la precariedad económica jugaba en contra de su crecimiento como atleta, pero que todo empezó a cambiar con su llegada a la selección nacional
Dormir en el piso y hasta en la casa de guardias de la Armada Dominicana fueron parte de los obstáculos que debió enfrentar Luisito Pie antes de convertirse en medallista olímpico.
La situación cambió a partir del momento en que llegó a la preselección nacional de taekwondo, aunque las dificultades no desaparecieron del todo.
Obtener el pasaporte se convirtió en una odisea debido a las múltiples trabas con que se encontró para conseguir el documento que le permitiría salir a representar a la República Dominicana en competiciones internacionales.
“En un principio me negaban el pasaporte, sin darme una justificación ni una explicación convincente, a pesar de que cumplía con los requisitos establecidos”, recuerda.
“La respuesta era siempre la misma, que mi situación estaba bajo investigación y eso me generaba en aquel momento un estado de gran incertidumbre”, sostiene.
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Destaca que ese impasse se pudo resolver y en el 2012 realizó su primer viaje (fuera de República Dominicana) para un campamento en la Loma, centro deportivo de alto rendimiento en San Luis Potosí, México.
La barrera Gaby
Luego de un tiempo en la preselección nacional, Pie tenía la legítima aspiración de establecerse en la selección nacional.
Lograrlo no sería tarea fácil debido a que su categoría (menos de 58 kilos) era una plaza ocupada en ese entonces nada más y nada menos que por la principal figura del taekwondo dominicano y uno de los atletas más exitosos de República Dominicana, Gabriel (Gaby) Mercedes.
“Para hacer el equipo tenía que enfrentar a los mejores de la división, entre los que se encontraba Gaby Mercedes”, recuerda.
El torneo eliminatorio de taekwondo para conformar el plantel nacional que iría a los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014 se celebró en el Pabellón de Combate del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte y el nativo de Bayaguana se quedó con la plaza que por más de una década había ocupado “Gaby” Mercedes, múltiple campeón panamericano y centroamericano y del Caribe, pero sobre todo medallista olímpico y mundial.
Las críticas por ese cambio no se hicieron esperar y en la prensa deportiva se proyectaba un fracaso del taekwondo dominicano en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
Llegado el momento, Pie sepultó la incertidumbre creada por tener que colocarse las botas de Gabriel Mercedes cuando en la cita de Veracruz se alzó con la medalla de oro que cuatro años antes, en Mayagüez 2010, había conquistado el nativo de Monte Plata.
Salvó honor de RD en Río
En Río 2016, Pie no solo fue el único atleta dominicano en obtener una presea, sino que salvó, y amplió, la racha de República Dominicana de continuar apareciendo en el cuadro de medallas de los Juegos Olímpicos en las últimas cuatro ediciones.
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Se recuerda que en Atenas 2004, la delegación dominicana obtuvo una presea de oro, con Félix Sánchez (atletismo), cuatro años después, en Beijing, 2008, subieron al podio Félix Díaz (boxeo, medalla de oro) y Gabriel Mercedes (taekwondo, plata).
La siguiente edición de los Juegos Olímpicos se celebró en Londres 2012, donde Félix Sánchez hizo sonar el himno nacional y Luguelín Santos se alzó con un metal de plata. En Río, Pie que ahora cuenta con 28 años de edad, se adjudicó una medalla de bronce.
“El camino no ha sido fácil, la situación de precariedad económica fue un factor que jugaba en contra de mi crecimiento deportivo, tuve que dormir muchas veces en un tatami, pero gracias a Dios y al deporte, mi vida ha cambiado positivamente”, concluyó.
