La sociedad dominicana de hoy vive un proceso de cambio, con marcadas diferencias entre los estratos sociales, altos niveles de desigualdad que son más elevados en las poblaciones distantes de los principales centros económicos, y con una dosis de discriminación hacia las personas que viven en los barrios marginados.
La afirmación es de la antropóloga social Tahira Vargas, quien plantea que esas diferencias que señala, son notables en el Gran Santo Domingo, donde las diferencias socioeconómicas se perciben desde el Polígono Central, en el Distrito Nacional, hasta los municipios que integran esa demarcación.
Pero si esas desigualdades son muy marcadas en el Gran Santo Domingo, peor aún en determinadas zonas del país, sobre todo en la franja fronteriza.
“Hay unas diferencias territoriales muy grandes entre provincias, cada vez que te alejas de Santo Domingo te vas encontrando con convivencias sociales distintas, con condiciones socioeconómicas muy diferentes, menos oportunidades de empleo, donde el Estado se ha convertido en una fuente importante y además se ha fortalecido el caciquismo político”.
En contraposición, Vargas expresó que en esas demarcaciones se dan, sin embargo, unas dinámicas de convivencia y organización social comunitaria muy diferentes a lo que pasa en Santo Domingo.
“También hay unas identidades, unos arraigos fuertes hacia el microterritorio, los pequeños campos donde la gente se siente del lugar, lo que no ocurre en Santo Domingo”.
Un elemento característico de esas poblaciones es también la solidaridad, un elemento importante en su identidad, afirmó Vargas.
Discriminación al barrio
Vargas cuestionó que se discrimine a los residentes en los barrios por su condición socioeconómica, y sobre todo que se vincule a todos con hechos delictivos sin tomar en cuenta que las situaciones que se dan allí también ocurren en otros sectores de ingresos medios.
“La gente sale desde las 5 de la mañana a trabajar, entonces la vida del barrio siempre es de mucho movimiento, de mucha interacción entre la gente, de mucho conocerse cada quien, vincularse de alguna manera, y solidarizarse, ese es el barrio”.