Gustavo Rodríguez 
Mario Alvarez Soto, el atleta más laureado en tres décadas.
Mario Alvarez Soto, es una leyenda del deporte mundial, que le ha dado resonantes triunfos en diferentes eventos internacionales logrando medallas para la nación
Mario Alvarez Soto, uno de los atletas aficionado más dominante en el país, con una gran cantidad de medallas de diferentes colores, en tenis de mesa recuerda con satisfacción en su exitosa carrera vencer a destacados atletas en el campeonato mundial, en Malasia, además fue un activista defensor de los atletas cuando necesitaban de su ayuda frente a sus organismos, donde se ganó el sobrenombre de “el sindicalista de los atletas”.
Alvarez Soto, nació para triunfar en la vida, además de un destacado tenimesista a nivel mundial, fue un exitoso en la educación donde alcanzó graduarse de varias carreras, que le valieron para ingresar a empresas en su retiro.
Es un gerente deportivo y profesional de la administración, razón por la cual fue electo presidente del Club Naco, donde había desempeñado varias funciones, labor que le valió para la confianza de los socios.
El más laureano atleta aficionado dominicano, dominó con amplio margen a los rivales en las décadas del 70, 80 y 90, alcanzando preseas a nivel Centroamericanos, Iberoamericanos y los Panamericanos, donde puso en alto alto el nombre de la República Dominicana. Formó parte de la trilogía junto a Raymundo Fermín y Juan Vila, que fueron bautizados como los “chinitos del Caribe”.
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Alvarez Soto, fue entrevistado por redactores de Hoy sobre sus principales logros y respondió “campeón latinoamericano en Guajaca y Xalapa en años consecutivos, lo que me dio el derecho de representar a esta zona en la Copa del Mundo en Malasia, donde quedé número 11, derrotando a Carl Prean, de Inglaterra el número 5 del mundo en ese momento y al campeón de USA, Danny Seemiller entre otros”.
Sobre la derrota que más le dolió dijo “La derrota: final de los Panamericanos 1979 San Juan, PR. En una controversial decisión del árbitro puertorriqueño Manuel Dereaux, cuando ya celebrando, luego de haber ganado 23/21 el game final, celebrando todos, dijo que había cantado let dizque por una bola que se había metido en el terreno, e hizo repetir el punto”.
Defensor de los atletas
Alvarez Soto proclamó que es un fiel defensor de los atletas en todas sus manifestaciones, aunque no comulga con lo mal hecho, ni las inconductas”.
“El joven que se dedica con amor y entrega a un deportes X tiene todo mi apoyo”, insistió.
Expuso que su relación con el Comité Olímpico Dominicano, en sus años de jugador, siempre fueron buenas, sin embargo, decía las cosas que no le gustaban con respeto y altura.
Recordó que fue exaltado al Pabellón de la Fama en el Ceremonial del 2005. Nació en Santo Domingo el 5 de agosto de 1960. Se inició en la actividad a los 13 años y perfeccionó su juego de tal manera, que mereció cuatro veces (1981, 1985, 1986 y 1993) el galardón de Atleta del Año, que otorga la Asociación de Cronistas Deportivos de Santo Domingo (ACD) e igual distinción del Comité Olímpico Dominicano, en los años de 1982, 1985, 1986 y 1993. El atleta que más medallas logró.
