NUEVA YORK. AFP. Meryl Streep encarna a una abuela dominante, drogadicta y enferma de cáncer en su último largometraje «August: Osage County», pero pese al desafío de interpretar a un personaje así, no cree tener el peor trabajo del mundo.
Como protagonista de la película y después de recibir una cerrada ovación en el preestreno esta semana en Nueva York, Streep, considerada una de las grandes actrices del cine mundial, fue interrogada muchas veces sobre la dificultad de encarnar a alguien como Violet Weston.
Su personaje es una matriarca amargada que intimida, ridiculiza e insulta a los miembros de su disfuncional familia a medida que éstos llegan a su casa en Oklahoma (centro-sur de Estados Unidos) para un funeral.
Una de las escenas más difíciles, admitió Streep, fue viajar en la parte trasera de un coche sintiendo que tenía que vomitar, pero dijo que ponerse en la piel de Weston fue el tipo de reto que los actores aman.
«Puedes entenderlo si alguna vez estuviste embarazada», dijo. Y agregó: «Uno se deja llevar con gritos y patadas por el dolor que siente. Pero uno realmente disfruta el momento que está viviendo».
«No fue un trabajo de socorrista en Sudán, fue muy gratificante», afirmó.
Las declaraciones de Streep tienen lugar semanas después de que el actor de Hollywood Tom Cruise afirmara, según los medios estadounidenses, que su trabajo era comparable al de quienes luchan en Afganistán.
«August: Osage County», dirigida por John Wells y que se estrenará en Navidad en Estados Unidos y Canadá y en enero en Latinoamérica, reúne a Julia Roberts, Julianne Nicholson y Juliette Lewis como las tres hijas de Streep. En el reparto también se destacan Chris Cooper, Dermot Mulroney, Sam Shepard, Ewan McGregor y Abigail Breslin.
Una «mandona» que podría valerle otro Óscar. El dramaturgo Tracy Letts, que ganó un Pulitzer por la obra de teatro que inspiró «August: Osage County» y también escribió el guión del film, dijo que Violet se basaba en su propia abuela, que en su ojos tomó «proporciones monstruosas».
Letts contó que el primer comentario de su madre después de leer la obra había sido: «Has sido muy amable con mi madre».
Una de las escenas más desgarradoras se basa en un hecho real, señaló Letts.
Por esta última actuación, Streep, admirada y multipremiada durante su prolífica carrera, ya es mencionada como candidata al Óscar.
Meryl Streep acumula 17 nominaciones, un récord que ella misma ha superado, y ha ganado hasta ahora tres estatuillas, la última en 2011 por su hiperrealista interpretación de Margaret Thatcher en «La dama de hierro».
La actriz de 62 años, que en los últimos años protagonizó el musical «Mamma Mia!», «El diablo viste de Prada» y la comedia romántica «It’s Complicated», ganó el Óscar dos veces, por «Kramer versus Kramer» en 1980 y por «Sophie’s Choice» («La decisión de Sofía») en 1983.
«En el último tiempo he tendido a escoger personajes mandones. Me doy cuenta de la tendencia. Tal vez es lo que traen los años», bromeó la actriz.
«Creo que (Violet) es una persona muy dramática, que no tiene freno en el instinto de decir lo que piensa».
Otro de los actores de la película, Chris Cooper, se inspiró en su propia experiencia de haber perdido a un hijo para interpretar al padre de un joven débil, encarnado por Benedict Cumberbatch.
El elenco vivió en casas contiguas durante el rodaje y ensayó la escena clave de una cena familiar, que llevó a tres días y medio filmar, durante una comida en la casa de Streep en la que todos aportaron algo al menú.
El actor Dermot Mulroney, quien bromeó acerca de que nadie comió la ensalada que él preparó, elogió a Streep y agradeció el poder haber trabajado con ella.
«Lo que Meryl fue capaz de hacer en cada toma fue perfecto. En cada escena variaba el tono de voz. Fue un honor y sentí una emoción que nunca olvidaré», comentó.