Los esfuerzos de México para desalentar la migración centroamericana mostraron cierta efectividad el lunes luego que algunas personas regresaron hacia el sur al haber una mayor vigilancia.
Un alto funcionario mexicano, que solicitó guardar el anonimato para poder declarar sobre las negociaciones con Estados Unidos, dijo que hace tres semanas unos 4.200 migrantes estaban arribando a la frontera de Estados Unidos a diario, y que ahora esa cifra ha disminuido a unos 2.600 por día.
El funcionario advirtió que era demasiado pronto como para llegar a conclusiones a partir de un período tan breve, pero enfatizó que el gobierno mexicano confía en que sus medidas funcionarán.
Hasta el lunes, las autoridades mexicanas habían hablado de emplazar 6.000 efectivos en su frontera sur, pero Maximiliano Reyes, subsecretario de Relaciones Exteriores, dijo en una conferencia de prensa en Tapachula que algunos de ellos se irían a la frontera norte y que unos 2.400 serían emplazados en el sureste de México. De ellos, 426 llegaron el sábado a Tapachula, señaló.
La Guardia Nacional trabajará con agentes de inmigración para combatir a los contrabandistas de migrantes y proteger a éstos. Reyes se negó a dar más detalles sobre el emplazamiento para que los contrabandistas no estén al tanto.
En el río Suchiate, que forma parte de la frontera de México con Guatemala, el comercio usualmente bullicioso parecía menos activo en este poblado fronterizo un día después de que media docena de infantes de Marina se presentaron en la margen mexicana.
Tomás Leyva, un salvadoreño de 65 años, se preparaba para abordar una balsa de regreso a Guatemala. Dijo que huyó de su hogar debido a una amenaza de una pandilla, y planeaba regresar más tarde a México por el puente fronterizo y solicitar asilo en una estación migratoria oficial. “Ahora está más serio. Es más estricta la situación, porque los militares que estaban ayer antes no había», señaló Leyva, un albañil convertido en pastor y quien dijo que huyó de San Salvador después de que una pandilla amenazó con matarlo. “