El gobernador Pedro Pierluisi, anunció subidas salariales a partir de julio para los maestros y para los bomberos.
Puerto Rico.– Varios miles de personas, convocadas por sindicatos y asociaciones, entre ellas la Federación de Maestros, marcharon ayer en San Juan con el fin de reclamar al Gobierno puertorriqueño mejoras laborales y criticar medidas para reestructurar deuda pública.
Edwin Morales, vicepresidente de la Federación de Maestros de Puerto Rico, dijo que el propósito de la manifestación fue el retiro de los maestros, “que no se ha atendido”, a diferencia del ajuste salarial.
Tras las multitudinarias protestas de la últimas semanas, el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, anunció subidas salariales a partir del próximo julio de US 1,000 mensuales para los maestros y de 500 para los bomberos. “Aunque entendemos que eso del aumento es el paso a la dirección correcta, hay mucho por alcanzar. Estamos cansados de promesas”.
«Aunque entendemos que eso del aumento es el paso a la dirección correcta, hay mucho por alcanzar. Ya estamos cansados de promesas, queremos acciones para que la de maestro en Puerto Rico sea una profesión valorizada y digna», dijo Morales, maestro de Matemáticas.
«Nosotros vamos pa’ lante a defender nuestro retiro en todos los espacios. No estamos pidiendo nada del otro mundo. Aquí se le está pagando a muchos inversionistas que hicieron para obtener ganancia de la quiebra del país y eso es inmoral», abundó.
Los manifestantes también rechazaron muchas condiciones del ya aprobado Plan de Ajuste de la Deuda (PAD), que diseña el camino para sacar a la isla de la quiebra, lo que quedó demostrado en la pancarta de la cabecera de la marcha: «El pueblo antes que la deuda». Además de la Federación de Maestros, secundaron las protestas la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), el Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores (SPT), la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier) y la Federación Central de Trabajadores, entre otros.
La marcha arrancó en la entrada del estadio Hiram Bithorn, en la avenida Roosevelt, y continuó hacia el expreso Las Américas, el cual los manifestantes bloquearon en dirección a Caguas, municipio aledaño a la capital.