Aunque la República Dominicana ha avanzado en normativas y políticas públicas en materia de violencia de género e intrafamiliar, es fundamental continuar trabajando desde la educación integral y la promoción de una cultura de igualdad de derechos y oportunidades, para desmontar todas aquellas ideas que minimizan o normalizan las distintas expresiones de la violencia hacia las mujeres, adolescentes y niñas.

Consultada sobre los últimos casos de feminicidios registrados en el país, Jesica Croce, directora de Prevención y Atención a la Violencia del ministerio de la Mujer, afirmó que la violencia de género es un flagelo social, histórico, multidimensional, presente a nivel global, y basado en desigualdades estructurales de las sociedades, la cual se reproduce en la cotidianeidad, a partir de imaginarios y prácticas sociales. Desde su óptica, para enfrentar el problema es necesario seguir comprometiendo, motivando y empoderando a todos los sectores sociales, especialmente a nivel comunitario, para que puedan ser también actores de primer orden del cambio de cultura tan necesario para la paz, la seguridad, el bienestar y el desarrollo de toda la sociedad.

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Precisó que la falta de autonomía económica de muchas mujeres, y las diversas situaciones de vulnerabilidad social, y/o ausencia de redes de apoyo comunitarias, representan factores de mayor riesgo para aquellas mujeres que se encuentran en situación de violencia de género e intrafamiliar, dificultando la continuidad de sus procesos de denuncia, o su acceso al sistema de protección.

En este sentido, pondera la importancia de continuar fortaleciendo las políticas y programas existentes dirigidos al apoyo económico y al logro de la autonomía económica, sobre todo, de aquellas en mayor vulnerabilidad social, ya resulta clave para su empoderamiento y para que puedan sobrepasar los ciclos de la violencia.

Acciones

De acuerdo a lo explicado, desde el ministerio de la Mujer se han desarrollado múltiples estrategias de prevención y respuesta, que incluyen la promoción de los servicios dirigidos a la sensibilización y articulación comunitaria para la prevención, la atención especializada a víctimas desde múltiples espacios, la difusión de la Línea de Emergencia *212 (funciona las 24 horas del día, todos los días del año), para la respuesta y rescate ante situaciones de violencia de género e intrafamiliar, la promoción de las Casas de Acogida, como espacios seguros y confidenciales para resguardar la vida de las mujeres, y sus hijos, la implementación de un programa de apoyo económico dirigido a víctimas y familias acogedoras de niñas, niños y adolescentes en orfandad por feminicidios, entre otras acciones que de manera articulada con las instituciones del sistema de protección a las víctimas de violencia, ofrecen atención y acompañamiento desde un abordaje integral.

Herramientas digitales

Asimismo, la funcionaria dijo que se han incorporado distintas herramientas para continuar acercando los servicios del sistema de protección a toda la población, tales como el Mapa de Servicio y el chatbot SARA, las cuales funcionan desde la página web del ministerio de la Mujer.

Ambas iniciativas se suman a la ampliación y mejora de la calidad de todos los servicios de atención y respuesta a la violencia, a través de las oficinas provinciales y municipales, precisó.

De igual forma, en las Casas de Acogida, han sido protegidas 8,019 mujeres con sus dependientes, informó Croce, tras ponderar el respaldo ofrecido desde el Estado.