Las micro, pequeñas y medianas empresas (mipyme) son las más afectadas por la inseguridad ciudadana que vive el país actualmente, según reveló el estudio “Reflejo de la Inseguridad Ciudadana en el Clima de Negocios”, presentado ayer por la Asociación de Jóvenes Empresarios (ANJE).
De acuerdo a la investigación, que fue realizada el año pasado, el 44% de las empresas encuestadas afirman que sus negocios han sido víctimas de algún acto delictivo, mientras que el 55.5% dice lo contario.
De las empresas que fueron víctimas de delitos, al 36.8% les ha ocurrido 5 o más veces y al 21.1% les ha pasado más de tres veces.
Indica que para el 75.5% de las empresas la inseguridad ha empeorado en los últimos 12 meses, el 21.9% considera que está igual y solo el 2.3% considera que ha mejorado.
Señala que los datos evidencian que los robos sin armas representan un 24.6%, mientras que con el agravante de armas alcanza un 17.9 por ciento.
Eugene Rault Grullón, presidente de ANJE, señaló que el tema de la seguridad ciudadana es de suma importancia para la sociedad, así como para el sector empresarial, ya que de acuerdo a otros estudios de organismos internacionales, su vinculación con la competitividad es estrecho, sobre todo cuando son las empresas las que deben suplir las carencias del sistema de seguridad.
Citó que algunos datos evidencian que la RD posee la percepción de inseguridad y victimización más alta de América Latina, con 64.8% por el deterioro de la seguridad, según el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Según el estudio, como consecuencia, la inseguridad ciudadana reduce la productividad de las empresas; deteriora el clima laboral interno; disminuye el rendimiento de los empleados y baja las ventas.
La investigación fue hecho a nivel nacional, con muestra de 128 empresas.
Denuncia. Precisa que el 71.9% de las empresas denunció el delito a las autoridades, a diferencia del un 28.1 por ciento que decidió no hacerlo.
El 43.9% de las empresas que dieron parte a las autoridades dijeron que no recibieron respuesta de esta, un 26.8% dice que su investigación está en proceso y para el 12.2% la denuncia fue ignorada.
Indica que del 28.1% de las empresas que decidió no denunciar el delito ante las autoridades, 34.6% dijo que no lo hizo por falta de confianza y el 30.8 por ciento manifestó que no valía la pena hacerlo.
La investigación considera que la falta de repuesta de las autoridades produce que el 15.4 por ciento de las empresas víctimas prefieran arreglar por propia cuenta el hecho.