Montecristi: casas con historias

Montecristi: casas con historias

Cuando visitas Montecristi no te imaginas que es mucho más que el Morro y sus bellezas naturales. Su icónico reloj es la muestra más conocida de una hermosa arquitectura reflejo de una pasado lleno de prosperidad, y que hoy es otro atractivo importante para visitar esta provincia.

Esta ciudad tiene un centro histórico que conquistaría a cualquier turista interesado en conocer su historia a través de sus hermosas casas de estilo victoriano.

Caminar por sus calles es viajar al pasado y recorrer la influencia francesa de su arquitectura. Hay algunas muy bien conservadas y otras que, por carecer de ayuda de las autoridades, tienden a verse descuidadas y abandonadas.

Aparte de la iglesia San Fernando y el reloj de Montecristi, ubicados en los alrededores del parque Duarte, esta provincia tiene un conjunto de residencias que revelan la bonanza económica de esta notable ciudad que tuvo su apogeo a finales del siglo XIX y principio del XX.

Cuando decidas conocer algunas de ellas, debes comenzar por la casa Rivas de Farías, ya que en ella vivió Manolo Tavares, héroe nacional, con sus padres y hermanos, por lo que se conoce como “la casa de Manolo”.

A pocos metros puedes pasar por la casa Socías Núñez, construida en el 1890 y se caracteriza por su fachada original.

Tu recorrido debe continuar en la casa o villa Doña Emilia, que data del 1895 y es de arquitectura antillana. La misma perteneció a Emilia Jiménez viuda Rodríguez, propietaria, junto a su hermano, de la Casa Jiménez y Compañía, importante casa comercial de Montecristi.

Es bueno aclarar que pese a la belleza que la misma mostrara, en tiempos atrás, hasta el momento ha permanecido en remodelación, sin que se concluya.

Una hermosa casa victoriana es la de Isidor Silva, de arquitectura popular . Se diferencia de las demás porque conserva las columna y barandas originales. En su interior todavía se refleja la belleza de la época en sus acabados y mobiliarios.

Puedes conocer la casa Molina Gil, construida finales del siglo XIX con un estilo vernáculo urbano con galería de madera, techo de cinc. Esta fue propiedad de Joaquín Díaz Belliard.

Otra vivienda de gran interés arquitectónico e histórico es Casa Rivas Petit, construida en el 1875. Es una casa de madera, techo de cinc de cuatro aguas. En su fachada principal se presentan tres puertas que abren hacia la calle. Ella tiene piezas originales de bronce.

Asimismo puedes apreciar, la casa Nouel Peña construida en 1892 y que se caracteriza porque su galería frontal, con techo separado del principal, está soportada por columnas donde se conservan la crestería y la baranda originales.

Sus propietarios actuales conservan mobiliario de la época, como lámparas y un mueble librero integrado a la pared con monogramas tallados.

Datos de importancia. Aunque es de una arquitectura moderna, Montecristi, tiene un museo que data desde 2003, pero actualmente está cerrado, según sus residentes, por carecer de un acuerdo con el Ministerio de Cultura.

En 1983, el Poder Ejecutivo creó, mediante decreto, el Parque Nacional de Montecristi. la Ley 241 lo declaró en 1984 Zona Turística, y en 1993, se creó como Quinto Polo Turístico.

Para obtener más información sobre estas casas dirigirte al Clúster de Montecristi.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas