Por los delitos de tentativa de homicidio, violencia intrafamiliar agravada, incendio y abuso psicológico a menores de edad, la Fiscalía de Santiago logró que el Primer Tribunal Colegiado de esta demarcación judicial, condenara a 20 años de prisión a una mujer, madre y expareja sentimental de las víctimas.
La Fiscalía de Santiago que logró, junto a la Policía Nacional, el arresto flagrante de la procesada, Yisel Mora Rodríguez, recolectó una importante cantidad de elementos de pruebas en el lugar del hecho para sustentar la acusación y demostrar que su conducta antijurídica debía recibir el peso de la justicia.
La fiscal litigante, Reyna Jiménez, subrayó la gravedad de los ilícitos, sobre todo en lo concerniente a la afectación psicológica que pesa sobre las victimas, los niños con edades de 3 meses, 1 año, 6 y 11 años; quienes sufrieron el terror y amenaza contra sus vidas, cuando su progenitora incendió la casa, con ellos en su interior.
En representación de la Fiscalía de Santiago, la litigante expuso que la noche del 21 de noviembre del 2020, día en que ocurrieron los hechos, la imputada irrumpió en la casa de su expareja, lo halló dormido y sin mediar palabras, se abalanzó sobre él, propinándole bofetadas en la cara y mordiéndolo en brazos y otras partes del cuerpo.
La relación circunstanciada de los hechos describe que la imputada tomó gasolina del motor de su expareja y tras rociarlo por debajo de la puerta de la habitación, lanzó un fósforo encendido.
Las víctimas, el adulto y los menores de edad, se encontraban encerrados en la vivienda, mientras era consumida por las llamas. Al llamado de auxilio, los vecinos lograron rescatar a los menores y el adulto salió por una puerta trasera.
La Fiscalía de Santiago presentó al tribunal constancia de los daños materiales en la vivienda provocados por la conducta delictiva de la mujer; pero, además, evidencias periciales acerca de los daños psicológicos que sufrieron los menores y el adulto, este último en quien se obtuvieron resultados que evidencian que ha sufrido violencia de moderada a severa por parte de su expareja.
Tras un llamado al Sistema de Atención a Emergencias y Seguridad 911, la sección de Siniestros y Explosivos Región Norte de la Policía Nacional vio características de llama abierta en la escena, lo que confirmaba que hubo manos criminales e intencionales.
Por todo lo antes dicho, el órgano acusador formuló cargos penales contra la mujer por violación a los artículos 2, 295 y 304 del Código Penal Dominicano, así también el artículo 396 (literal B) de la Ley 136-03 que crea el Código para la Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes y el artículo 56 de la Constitución Dominicana, que castigan la tentativa de homicidio, incendio, violencia intrafamiliar agravada y abuso psicológico en perjuicio de las víctimas menores de edad y contra el adulto, su expareja.
Ante el Colegiado, integrado por los jueces Juan Carlos Colón, Claribel Mateo y Gladys de los Santos, la Fiscalía de Santiago hizo referencia al estado de terror que los hechos dejaron en los menores de edad, quienes refirieron en los testimonios que fueron debidamente recolectados, que su madre, la imputada, los quería quemar vivos junto a su padre.