El Museo Maguá, otro importante destino para el conocimiento de las raíces culturales y como atracción turística, no solo muestra otro pedazo de historia taína, sino que profundiza en la formación de jóvenes en la elaboración del chocolate criollo, del casabe, de sombreros de cana, del manejo del barro, del guano, y otros elementos de gran trascendencia para el cultivo raíces culturales.
El director, Juan Peña, con la emoción que lo caracteriza cuando a tratar sobre las raíces refiere, relató que allí acaba de concluir un ciclo más de enseñanza de fabricar el chocolate casero.
Puede leer: Fernando González apoya hacer estudio mina
Precisó el investigador histórico-cultural, que desde el museo, que construyó cuando apenas era un adolescente, cada cierto tiempo, y con solicitudes de grupos comunitarios, imparten cursos intensivos sobre elementos ancestrales.
Sobre la fabricación del chocolate criollo, un importante elemento de la cultura campesina que pierde vigencia, indica que con los pocos recursos que logran conseguir han diseñado toda una estrategia para que continúe, aunque sea por los alrededores.
“Al Museo vienen estudiantes y junto con los profesores de arte, de historia, de cultura o con la dirección de esos centros, agendamos el curso”, explica.