El ministro de Educación, Andrés Navarro, abogó hoy por la transformación institucional del Estado dominicano para que las políticas públicas implementadas sean más eficientes y sostenibles en el tiempo, así como lograr un mayor nivel de educación de las nuevas generaciones para el desarrollo de un pensamiento lógico, crítico y creativo.
Al participar como orador invitado en el almuerzo-conferencia de la Cámara Domínico-Mexicana, celebrado en uno de los salones del hotel Sheraton, Navarro dijo que, ante esa realidad, es fundamental que a la par de generar oportunidades y capacidades, “tenemos que ir transformando el Estado dominicano con una nueva institucionalidad que garantice transparencia, participación y eficiencia en la aplicación de las políticas públicas.”
“Porque esa nueva población que estamos formando en las aulas no va a tolerar travesuras de los políticos, desaciertos ni impunidad; si hoy la sociedad dominicana es crítica y se está movilizando, la que se está creando en las aulas, de seguir como vamos, será mucho más crítica y con mayor capacidad de movilización”, enfatizó Navarro.
Destacó que el país tiene que imprimir confianza en la inversión nacional y extranjera, “pero eso implica un Estado confiable, transparente y eficiente, pues estoy seguro que por más recursos que se inviertan en los diferentes renglones de la vida nacional, si no transformamos el Estado, no lograremos que esos recursos satisfagan las aspiraciones de la población dominicana”.
Manifestó que el gobierno central y el país están comprometidos con generar las mejores condiciones a la inversión nacional e internacional, sobre la base de una educación de calidad con una visión integral, y una transformación institucional.
Temas relegados. Expuso que en todos los escenarios de discusión de la educación nacional e internacional, los debates se centran, exclusivamente, en los temas misionales como la mejora de los aprendizajes y las estrategias de formación de los docentes.
“Pero hay temas que nunca se debaten como si estuvieran proscritos en esos espacios, como la corrupción administrativa en la gestión de los sistemas educativos, la gestión de recursos humanos docentes y administrativos; la eficiencia en el soporte que se debe brindar a los centros educativos para que funcionen bien, así como los sistemas de control interno, de ahí que he insistido mucho en el abordaje de esos aspectos, porque entiendo que hay que ser sincero en la administración de los recursos para garantizar la sostenibilidad de las transformaciones y mejoras alcanzadas”, enfatizó.
Agregó que, ante esa realidad, el Ministerio de Educación está destinando cuantiosos recursos y aplicando ingentes esfuerzos con el establecimiento de alianzas con los sectores vinculados a la educación, para la construcción de una nueva institucionalidad.
Consideró que «la revolución educativa que impulsa el presidente Danilo Medina es el diseño educativo más adecuado que ha tenido la República Dominicana en materia de política pública en toda la historia democrática, con un valor público desde el punto de vista de gestión para resultados».
Entrega de «cajitas». Señaló que esa nueva institucionalidad en el Ministerio de Educación “deberá ser transparente, participativa y eficiente, en lo que yo creo firmemente”, al tiempo que planteó la necesidad de seguir profundizando las políticas de incentivos en el sector productivo, empresarial y agropecuario en las comunidades más vulnerables.
“Como lo está haciendo el presidente Danilo Medina, no entregando cajitas, funditas ni dádivas a la gente, sino colocando inversión, préstamos realistas, tecnología y capacitación para que la población genere sus propias oportunidades de desarrollo”.
El funcionario llamó la atención sobre la preocupación que envuelve al empresariado nacional respecto a la competitividad, renglón en el que a su juicio el gobierno central está realizando esfuerzos para avanzar, “pero ojo, porque me estoy dando cuenta desde el sector educativo, que cuando se habla de competitividad parece que sólo se alude a la empresa privada”.
En ese sentido, Navarro se preguntó: “Y el Estado no debe ser competitivo también?, ¿Hay posibilidad de que un país sea competitivo si el ente que lo gestiona no es competitivo? Me parece que esa es una contradicción”.
Estado competitivo. Declaró que, si se quiere que las empresas y el capital del país sean competitivos en el mercado internacional, se hace indispensable contar con un Estado competitivo también para evitar generar una ficción en el intento de lograr algo que nunca llegará.
“El capital social de un país, además de implicar instituciones sólidas, implica también el grado de confianza entre los sujetos determinantes del desarrollo de esa nación. Creo fielmente en esa fórmula, y la transformación que estamos haciendo en la educación nos está mostrando la necesidad de que se permee todo el sistema del Estado dominicano con reformas y modernización», puntualizó Navarro.
Por otro lado, el presidente de la cámara, Ottoniel Aybar, resaltó la importancia de la educación para el desarrollo del país, “y en ese sentido reconocemos los esfuerzos realizados por gobierno a través del Ministerio de Educación con su incumbente Andrés Navarro, para mejorar sustancialmente ese vital renglón para el desarrollo de la población”.
Al encuentro asistieron, además, el embajador mexicano Carlos Tirado Zavala; Samuel Conde, presidente de Educa; Marco Antonio Sánchez, director ejecutivo de la entidad anfitriona; así como Mario Lama, Federico Domínguez y Alejandro Peña.
También, la viceministra Denia Burgos; Julio Santana, director de Gabinete del Ministerio de Educación; Reynaldo Espinal, director de Relaciones Internacionales; Milton Torres, de Fiscalización Escolar; José Miguel Martínez, de Gestión de Riesgo, y Minerva Pérez, de Orientación y Psicología, entre otros funcionarios y personalidades invitadas.