“Aún puedo ver el tren partir y tu triste mirar, un año no es un siglo y yo, volveré”, fanáticos del cantautor argentino Diego Verdaguer, reprodujeron hasta no más poder el clásico tema del artista ayer, al enterarse sorpresivamente en las primeras horas de la mañana que su artista se había ido para no regresar.

Y es que la noticia del fallecimiento del intérprete de “Volveré” cayó como un balde de agua fría.

Pero, ¿de qué murió Diego Verdaguer? era la pregunta qué muchos se hacían justo al leer el sensible comunicado enviado por su esposa, la también artista Amanda Miguel, con quien el fallecido procreó una hija que lo convirtió en abuelo, y sostuvo un matrimonio de casi 5 décadas; el cual con sus altas y bajas fue uno de los más sólidos de la industria.

Aunque el comunicado, elaborado con pesadumbre y delicadeza, indicaba que el artista había “dejado su hermoso cuerpo para continuar su camino y creatividad en otra forma de vida”.

Lo cierto es que la salud del compositor de populares canciones como “Voy a conquistarte”, “La ladrona” y “Lágrimas derramo por ti”, se vio comprometida antes de su internamiento el pasado mes de diciembre tras contraer la COVID-19, enfermedad que le produjo otras complicaciones que terminaron matándolo.

“Toda la familia estamos sumergidos en este dolor, por lo que apreciamos su compresión en estos momentos tan difíciles”, puntualiza la notificación con la que revelaron su partida.

Una de las últimas expresiones que Verdaguer hizo pública, antes de que se reportara su deceso, fue “eres y serás la ladrona que me robó el corazón”, junto a esta dedicatoria de amor también se aprecia una hermosa fotografía en la playa junto a su ahora viuda Amanda Miguel.

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Reacción de comunidad artística

Destrozados, así se definen varios artistas, a quienes también la noticia les impactó, especialmente a los mexicanos, país cuya nacionalidad adquirió y donde hizo grandes amigos el fenecido artista.

“No tengo palabras para expresar lo que pasa por mi corazón con esta lamentable e inesperada noticia, se lamentó Marco Antonio Solís tras considerar que Diego sembró en su corazón una semilla de amistad eterna.

En ese mismo sentido, Gloria Trevi, aunque no pudo evitar sentirse triste, agradeció a la vida porque tuvo la oportunidad de ver a su amigo con vida hace poco.

Sin embargo, Ana Bárbara no corrió con la misma suerte.

Tenía una colaboración pendiente con él. “Allá nos vemos (refiriéndose al cielo) para terminar lo que nos quedó pendiente con nuestra canción”, prometió la cantante y compositora, desalentada por su partida y agradecida por la cercanía.