Yamira Taveras 
El arzobispo Metropolitano de Santiago, Freddy Antonio de Jesús Bretón Martínez, refirió ayer que la verdadera honra a la Patria es la conducta personal, esa que no negocia su dignidad, su libertad y su accionar en cualquier situación.
Al ofrecer la homilía en el tedeum por el 174 aniversario de la Independencia Nacional, en la Catedral Santiago Apóstol, señaló que sería inútil creer que la Patria es la bandera o es el escudo como medalla preciosa en el pecho.
“Pero hasta un corrupto se pone una bandera en su pecho y se prende un alfiler con el escudo en la solapa de su saco. ¿Eso es honrar a la Patria?
“Sí hay que respetar los símbolos patrios y ahora más que nunca, pero la verdadera honra a la Patria es la conducta personal, y para eso no hay que abrir la boca, simplemente conducirse como un ciudadano respetuoso de las leyes, en justicia y honradez, procurando hacer la diferencia”.
El obispo expresó que cada día hay que orar por los hombres y mujeres que tienen sobre sus hombros la responsabilidad del servicio público, como el Presidente de la República y las autoridades que tienen una carga pesada.
Bretón Martínez expresó además que en la última Carta Pastoral la prensa fue muy crítica, señalando que faltaron muchos puntos importantes a los cuales no se refirieron, como el caso del tema haitiano.
Indicó que no se puede hablar de todo al mismo tiempo, y que aunque en esta carta no se mencionó el tema haitiano, la Conferencia del Episcopado emitió un documento extenso que incluso tiene referencias internacionales solamente sobre el tema haitiano.
“Hay quienes han ido a buscar en ese documento lo que no contiene, no ha faltado quien no haya dicho que falta tal cosa, pero no dice lo que hay por ejemplo el valor de la dignidad del ser humano.
Díganme si no tiene importancia el valor de la libertad de la solidaridad de la justicia, y todo lo demás, no es el momento de compartir excepciones, todo está ahí. Entonces hay gente que cree que estamos solo para dar declaraciones”, expresó el obispo Bretón Martínez al oficiar la misa en la catedral.
