POR UBALDO GUZMAN M.
La construcción del viaducto en la avenida Hermanas Mirabal, en Villa Mella, ha afectado las ventas de los negocios que funcionan desde la urbanización Máximo Gómez hasta la avenida Charles de Gaulle.
Los comerciantes resaltaron como efecto de la obra el desplome de las ventas, aunque no se oponen a la construcción del Metro, porque servirá para mejorar el desplazamiento vehicular en Villa Mella.
La construcción del viaducto, además de esparcir un polvo que invade toda el área, provoca taponamientos, por lo que las personas llegan tarde al trabajo.
Las opiniones de los comerciantes, en líneas generales, coinciden en los mismos aspectos.
Carmelo Claudio, propietario del colmado Génesis, ubicado en Santa Cruz, dijo que a las 11:00 de la mañana el local parece un cementerio; los clientes escasean y, para colmo, los agentes de Amet no permiten que los vehículos se estacionen en el frente, como ocurría antes de comenzar la construcción del viaducto.
El polvo está dondequiera. Se pasa un paño y al rato todo continúa igual, y debe repetirse la misma tarea. El polvazo a nosotros nos afecta muchísimo, recalcó.
Las ventas están por el suelo. Mira cómo estamos él ( señaló un dependiente) y yo parados, porque no se vende nada. A partir de que se inició la construcción del Metro se ha caído la venta y nos ha afectado mucho, señaló con pesar.
En el negocio La Curva, frente a Primaveral, será perjudicado, debido a que la Oficina Para el Reordenamiento del Transporte (OPRET) dispuso su eliminación. Por la edificación le dieron RD$235,000, muy poco, a su juicio, lo que gastó en deudas. La tienda de ropas vende entre RD$1,500 y RD$2,000 cada día.
Yo he sido uno de los más afectados por la construcción del Metro. Yo estaré aquí hasta el último momento. Las ventas han bajado, dijo Miguel Rosario, su propietario. Cada cierto tiempo tiene que sacudir el polvo con una escobilla. La vía es mojada a veces, pero no con la frecuencia deseada.
Para Niovis Fulgencio, empleada de Fácil Comercial, situada en El Torito, la construcción del viaducto ha afectado las ventas del negocio. La invasión del polvo es tan fuerte que la señora Dora Vinicio tiene que quitarlo cuatro veces al día de los muebles y demás mercancías. Está cansada de esa labor. En el frente echan agua tres veces al día para aplacar el cúmulo de polvo.
Según Fulgencio, el viaducto trastorna al transporte, porque los tapones son permanentes y los empleados no pueden llegar a tiempo. Los suplidores no pueden estacionarse en el frente, porque se presentan los agentes de Amet y deben subirse a la acera.
Miguel Coste, propietario de Almacenes Jeffry, ubicada en Buena Vista Segunda, señaló que ha sido perjudicado por el viaducto. Las mercancías hay que limpiarlas constantemente. El tránsito provoca dificultad en el abastecimiento.
En la tienda Exclusividades Sarah, localizada en la entrada a la Colonia de los Doctores, las ventas han caído. El agua se acumula en el frente, lo que impide que los clientes puedan entrar al negocio. Diomary de Jesús Martínez, empleada de la tienda, se queja de que llega a tarde al negocio por la construcción del viaducto.
José Perdomo, administrador de New York-New York, ubicado en el kilómetro 10 de la avenida Hermanas Mirabal, consideró que la construcción del viaducto lo afecta por el momento.
La gente de la OPRET, cree, debiera mojar la avenida tres veces al día para reducir el polvo. El negocio está dedicado fundamentalmente a la venta de equipos de música, muy vulnerables al polvo, especialmente los lentes.
Elvi Hernández, quien labora en Car Wass Junior, permaneció interno tres días en un centro de salud, debido que se le complicó una gripe por el polvo. Los clientes acuden menos que antes por el polvo y los tapones.
Quién va a venir a lavar un carro si al poco tiempo se ensucia en la avenida, dijo.
Para Nélsida González, propietaria de Electromuebles Yamely, las ventas están muy lentas, aunque reconoció que el Metro es una obra que beneficiará a todos. Como en otros casos, los taponamientos provocan que los empleados lleguen tarde. El polvo obliga a que los muebles sean limpiados con frecuencia.
El establecimiento comercial se encuentra casi en la entrada de Buena Vista Primera.
La construcción del viaducto costará entre US$195 y US$200 millones. El tren ligero se instalará sobre 155 columnas. Todavía figuran algunos hoyos, donde se levantarán los pilotes, que tienen agua.