Buenos Aires. Odebrecht se comprometió hoy a colaborar para esclarecer los hechos de corrupción de los que se le acusa en Argentina, pero pidió respetar el marco legal que establece que no se abra un proceso en ese país contra los acusados que decidieron cooperar con la Justicia y ya son juzgados en Brasil.
“Esas personas ya están siendo sometidas a proceso en Brasil y para poder prestar declaración de manera amplia y eficaz tienen que ser primero reconocidos los derechos aquí en Argentina”, contó a Efe en Buenos Aires Pablo Maggio, abogado de la compañía brasileña en el país suramericano.
Tras saltar el escándalo de corrupción brasileño conocido como Lava Jato en 2014 -que afectó a importantes figuras de la política y a grandes empresas brasileñas y extranjeras- Odebrecht, adjudicataria en los últimos años de varias obras públicas en Argentina, firmó a finales de 2016 acuerdos de colaboración con el Ministerio Publico de Brasil y el Departamento de Justicia de EE.UU.
Fue en ese momento cuando reconoció haber pagado sobornos a funcionarios públicos e intermediarios en 12 países para acceder a licitaciones- en Argentina las coimas alcanzaron al menos 35 millones de dólares.
Según afirma Maggio, la compañía, que se dedica principalmente a la ingeniería y la construcción, se comprometió a colaborar con los países en los que se investigan los delitos pero siempre teniendo la seguridad de que se respeten los “derechos” acordados en Brasil para los exempleados de la empresa imputados que actúan de colaboradores de la Justicia.
En este sentido, el letrado destacó la imposibilidad de que esos “arrepentidos” también sean imputados en Argentina, ya que según recordó, tratados internacionales a los que se adhiere Argentina y la propia legislación local velan por que nadie pueda ser “perseguido dos veces por el mismo hecho”, así como por la limitación del uso de las pruebas y el secreto de las investigaciones para no entorpecerlas.