Es la primera causa de ceguera en el mundo. Aunque se trata con una operación, sigue siendo un problema global. El 50% de los ciegos en el mundo es por cataratas.

La catarata es la primera causa de ceguera en el mundo. No se cura con medicamentos, pero las intervenciones quirúrgicas son rápidas y eficaces.

Hay muchos tipos de cataratas y por tanto aunque la causa no es totalmente conocida, está relacionada con los procesos de oxidación y el envejecimiento, ahí está la clave fundamental.

La doctora Yesenia Matos, oftalmóloga pediatra y de adultos, confirma que las cataratas más frecuente y habitual es la relacionada con la edad, con el envejecimiento.

“Las catarata se producen principalmente por la opacidad del critalino, que es el lente natural que tenemos, es transparente y cuando está envejeciendo se va poniendo opaco”, explica.

Sin embargo, explica Matos que existen otros tipos de cataratas y otras causas. “Hay factores que pueden acelerar este proceso como, por ejemplo, un traumatismo ocular, una lesión en el ojo puede dañar el cristalino y esto puede llevar a la formación de catarata”, detalla la especialista.

De igual manera, la doctora Matos citó algunas enfermedades que favorecen la aparición de esta patología ocular, tales como: la diabetes, “también algunos medicamentos pueden provocar esta enfermedad como el uso prolongado de esteroides, además se presenta por factores genéticos y el estilo de vida, hábitos como fumar o consumir alcohol pueden predisponer la aparición. Por igual, existen cataratas congénitas en niños”, describe la oftalmóloga.

¿Cuáles son sus síntomas?

Hay un síntoma básico que es ver peor: puede ser por deslumbramientos; sensación de neblina; cambios en los colores, que se vuelven más amarillentos o ‘marronáceos’; visión doble e incluso múltiple.

Prevención

La prevención depende de la causa, en las cataratas seniles, si pensamos que tienen relación con el envejecimiento y la oxidación, evitar los oxidantes es un factor preventivo, aunque influye la genética y la alimentación.

El oxidante más universal es el tabaco y ahí se puede incidir, ya que es un factor facilitador de la catarata.

¿Se puede curar con medicamentos?

No, de momento no, asegura la doctora Yesenia Matos.

Según explica sólo es posible mediante cirugía y con este procedimiento se recupera una visión como la anterior o incluso mejor al disponer de una corrección óptica intraocular.

¿Cómo se opera la catarata?

La cirugía de la catarata consiste en quitar el cristalino (que es como una lenteja) que se ha vuelto opaco.

Hasta el último tercio del siglo pasado se quitaba y el defecto óptico se corregía con gafas, pero en la actualidad la estrategia, y este es uno de los grandes avances tecnológicos del siglo XX, es sustituir el cuerpo por una lente artificial, lo que condiciona la técnica.

El objetivo es quitar todo de la forma más limpia posible. Desde que aparecen las lentes intraoculares se deja una parte del cristalino, como si fuera su piel -la cápsula- que sirve de soporte para poner la lentilla.

¿Cuáles son las últimas novedades y cuáles beneficios aportan?

La cirugía de catarata ha ido por dos caminos, primero la seguridad, ligada a sistemas para extraer de forma eficiente el contenido de la catarata, a través de entradas cada vez más pequeñas para que la cirugía sea lo menos traumática y agresiva.

Hasta hace unas décadas se hacía una incisión grande que requería una serie de puntos, de forma que la operación que ahora hacemos en 10 minutos, se realizaba en 40/50 minutos; eso alargaba la cicatrización e implicaba mayor riesgo para el paciente. Si se daba un golpe o hacia un esfuerzo se podía romper un punto.

En la actualidad, se trabaja con entradas muy pequeñas, de apenas dos milímetros, autosellantes.