Las vacunas salvan vidas, según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS) evitan entre dos y tres millones de muertes anuales por difteria, tétanos, tosferina y sarampión. Asimismo, esta entidad considera que se trata de la intervención sanitaria preventiva más efectiva que existe.

Y contrario a lo que se pudiera creer, cuando se llega al otoño de la vida, es momento de volver a vacunarse, y reforzar vacunas no solo contra la gripe o influenza, sino también pensar en qué otras vacunas o refuerzos debemos recibir para proteger la salud.

Especialistas en vacunología de la OMS explican que las vacunas recrean la enfermedad sin producir la infección. De esta manera, estimulan al sistema inmunitario para que desarrolle defensas que actuarán en el momento en que se entre en contacto con el microorganismo que produce la infección y la enfermedad.

Puede leer: ¿Qué es el sarampión? Conoce sus síntomas y cómo prevenir

Agregan que, actualmente, muchas de las enfermedades de las que disponemos de vacunas han desaparecido o están muy controladas. Pero si dejáramos de vacunarnos, podrían volver a aparecer.

Atención a la gripe

La edad, la profesión o el hecho de padecer ciertas enfermedades pueden hacer necesario añadir más vacunas, como por ejemplo, la de la gripe.

A este respecto, la OMS manifiesta que la gripe es más que una molestia. “Es una enfermedad grave que cada año provoca entre 300.000 y 500.000 defunciones en todo el mundo. Las embarazadas, los niños pequeños, los ancianos con problemas de salud y cualquiera que padezca un trastorno crónico, por ejemplo, asma o cardiopatía, corren un alto riesgo de infección grave y muerte.

Los adultos mayores necesitan recibir vacunas para prevenir enfermedades graves.

Protege tu salud manteniéndote al día con tus vacunas.

El esquema que recomienda la Organización Mundial de Salud es el siguiente:

Mayores de 50 años:

Deben ponerse la vacuna contra la culebrilla (herpes zóster o shingles en inglés). La culebrilla causa una erupción cutánea o sarpullido que puede durar meses.

De 65 años o más

Esta población debe vacunarse para prevenir las enfermedades neumocócicas. Las enfermedades neumocócicas pueden incluir la neumonía, la meningitis y las infecciones de la sangre.

También es importante:

Ponerse la vacuna contra la gripe (influenza) todos los años. La vacuna estacional contra la gripe es la mejor manera de protegerse a sí mismo y a otras personas de la enfermedad.

Además aplicarse la vacuna triple contra el tétanos, la difteria y la tosferina (Tdap, por sus siglas en inglés). Toda persona debe ponerse esta vacuna una vez.

• Después de recibir la vacuna triple contra el tétanos, la difteria y la tosferina, hay que ponerse el refuerzo de la vacuna contra el tétanos y la difteria (Td, por sus siglas en inglés) o la dosis de refuerzo de la Tdap, cada 10 años para estar protegido.

Beneficios para la salud

Las vacunas protegen de enfermedades que pueden ser graves y, a veces, mortales.

Muchas de estas enfermedades son frecuentes, pero las vacunas pueden prevenirlas o reducir sus síntomas.

Incluso, si siempre la persona ha recibido todas las vacunas a tiempo, igual debe ponerse algunas vacunas por ser un adulto mayor. Esto se debe a que:

Los adultos mayores corren más riesgo de contraer ciertas enfermedades: tienen más riesgo de sufrir complicaciones graves de las enfermedades y la protección de algunas vacunas puede disminuir con el tiempo.

La Federación Internacional del Envejecimiento (IFA por sus siglas en inglés) recomienda seguir un esquema de vacunación, un elemento clave del envejecimiento saludable, que mejora la calidad de vida de la familia completa.