NACIONES UNIDAS. Los migrantes envían a casa miles de millones de dólares más que hace una década, y la tasa de crecimiento de remesas es casi el doble del incremento en la migración, de acuerdo con un reporte de Naciones Unidas difundido el miércoles.

El reporte comisionado por el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA) dice que las remesas aumentaron en un 51% de 2007 a 2016, mientras que la migración subió en un 28% y la población en los países de origen de los migrantes creció en un 13%.

La agencia de la ONU con sede en Roma, que combate la pobreza en zonas rurales, dijo que el reporte es el primero en examinar las tendencias migratorias y el flujo de remesas durante una década. Dijo que sus hallazgos se basan en una serie de estudios y encuestas comisionados por el fondo, así como análisis de datos del Banco Mundial.

Según el reporte, las remeses se incrementaron en casi todas las regiones del mundo, pero su marcado aumento entre 2007 y 2016 se debió principalmente a Asia, que registró un crecimiento del 87% en el dinero que los inmigrantes envían a casa.

El presidente del FIDA, Gilbert Houngbo, dijo que lo más importante es el impacto en las vidas de los familiares y de las otras personas que reciben el dinero.

“Las cantidades pequeñas de 200 o 300 dólares que cada migrante envía a casa conforman cerca del 60% del ingreso familiar, y eso hace una enorme diferencia en sus vidas y en las comunidades en las que habitan”, dijo a través de un comunicado.

Más de 200 millones de trabajadores migrantes mantienen a un estimado de 800 millones de miembros de su familia en todo el mundo, de acuerdo con el reporte.

Y se proyecta que este año 1.000 millones de personas una de cada siete en el mundo estará involucrada en el envío o recibo de más de 450.000 millones de dólares en remesas.

“Alrededor del 40% de las remesas 200.000 millones son enviados a zonas rurales en donde vive la mayoría de la gente pobre”, dijo Pedro de Vasconcelos, coordinador de remesas de FIDA y principal autor del reporte. “El dinero se gasta en alimentos, atención médica, mejores oportunidades educativas y una mejor vivienda y sanidad”.

El estudio estima que entre 2015 y 2030 se enviarán cerca de 6,5 billones de dólares a países de bajos y medianos ingresos.

Más de 100 países reciben más de 100 millones de dólares en remesas anuales, encabezados por China, India, Filipinas, México y Pakistán, dijo el reporte.

Las 10 naciones desde donde se manda más dinero son: Estados Unidos, Arabia Saudí, Rusia, Emiratos Árabes Unidos, Alemania, Kuwait, Francia, Catar, Reino Unido e Italia.