Miles de feligreses católicos celebraron ayer en el monumento Faro a Colón, la “Gran Fiesta de Corpus Christi”, en la que, bajo una incesante lluvia, el arzobispo metropolitano de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, ofició una misa, y afirmó que la pandemia de covid-19 enseñó a los cristianos la importancia de practicar la solidaridad.

En la eucaristía, concelebrada con obispos auxiliares, sacerdotes, diáconos y toda la feligresía, fue exaltada y adorada “la presencia viva de Jesús en la Eucaristía”, y hubo un llamado al pueblo dominicano a integrarse a la celebración del año Jubilar Altagraciano, con el lema: “Con María de la Altagracia, Adoremos a Jesús eucaristía”.

Monseñor Ozoria exhortó a los cristianos a practicar la solidaridad con sus hermanos, como respuesta a la situación que afecta a la población mundial.

“La pandemia nos ha dejado cosas que tenemos que aprender y practicar, entre ellas están la solidaridad con nuestros hermanos, así como la hermandad”, manifestó.

Manifestó: “La eucaristía es algo muy importante para los católicos, porque nos enseña a ser solidarios con las personas que tienen necesidades”, exclamó.

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Resaltó que, pese a las lluvias, a la celebración llegaron procesiones desde múltiples sectores del Gran santo Domingo organizadas por las Vicarías Territoriales.

Tras participar en las procesiones, con paraguas multicolores, cánticos y alabanzas, miles de feligreses rindieron devoción en adoración y participaron de la eucarística al Santísimo.

Escucharon la misa y oraron por la paz, la unidad, los pobres, enfermos, el buen vivir y el bienestar colectivo, en una celebración que inició pasadas las 4:00 de la tarde y concluyó alrededor de las 6:00.

Participaron representantes de vicarías de la arquidiócesis de la capital, entre estas las de Santo Domingo Norte, Este, Oeste y el Distrito Nacional.

El alcalde y la ceremonia

Estuvieron el alcalde de SDE, Manuel Jiménez; el senador de la provincia, Antonio Taveras, entre otros funcionarios.

“Santo Domingo Este se siente más que orgulloso de recibir a la comunidad católica de nuestro país. Nuestro ayuntamiento lo asume como un honor, ya que tenemos en la fe católica una de las tradiciones más consolidadas desde la propia creación de la nación, que se fundó bajo los principios cristianos de nuestros padres de la Patria”, exclamó Jiménez.