La fiscalía afirma que los Geeves querían quedarse con el bebé de Haigh, criado como "madre sustituta" (Director de la Fiscalía Pública de Nueva Gales del Sur)
En un juicio marcado por detalles escalofriantes, Robert y Anne Geeves, ambos de 64 años, enfrentan acusaciones de haber asesinado a Amber Haigh, su joven inquilina, para robarle a su bebé y posteriormente alimentar con su cuerpo a los cerdos. El caso, envuelto en un aura de misterio y horror, conmociona a Australia.
Robert y Anne Geeves, ambos de 64 años, se declararon inocentes del asesinato de la joven, quien fue vista por última vez en junio de 2002.
Amber Haigh era una joven de 19 años con una discapacidad intelectual que había mantenido una relación sentimental con Robbie Geeves, el único hijo de la pareja acusada. Tras el fin de su relación, Amber continuaba en contacto con los Geeves debido al alquiler de una vivienda. En junio de 2002, Amber fue vista por última vez, según los Geeves, cuando la llevaron a una estación de tren para visitar a su padre enfermo. Sin embargo, nunca llegó al hospital y su rastro se perdió en los vastos campos de Riverina de Nueva Gales del Sur.
Durante años, la desaparición de Amber quedó congelada en la justicia. Recién en 2011 una investigación forense determinó que la joven había muerto como resultado de un homicidio o accidente en el mismo mes de su desaparición. A pesar de esta conclusión, el caso permaneció sin resolver hasta que el Escuadrón de Homicidios reabrió la investigación bajo la categoría de “Casos sin resolver”, lo que finalmente condujo al arresto de los Geeves en 2022. El juicio continúa, a cargo de la jueza Julia Lonergan.
La teoría de los fiscales
Los fiscales sostienen que los Geeves querían desesperadamente tener otro hijo después de haber sufrido tres abortos espontáneos y el nacimiento de un bebé muerto. De acuerdo con Daily Mail, el fiscal, Paul Kerr, aseguró que la pareja utilizó a la adolescente como “madre sustituta” y aseveró que la intención de los Geeves era asumir la custodia y el cuidado del niño.
La revelación de que el padre del bebé era Robert Geeves, de 64 años, añadió una capa de controversia y tragedia, considerando que Robbie, el hijo de los Geeves, había sido novio de Amber. A raíz de esto,The Guardian informó, la adolescente y Robert firmaron un acuerdo escrito a mano que estipulaba que el hombre no intentaría tomar la custodia del niño a menos que ella lo permitiera.
La fiscalía argumentó que este documento era una prueba más de las intenciones oscuras de los Geeves. La teoría de los fiscales se sustentaba también en la historia de abuso y violencia que rodeaba la vida de Amber. Rebecca Pisaturo-McMillan, secretaria legal, testificó que la joven había buscado asesoría legal en agosto de 2001, manifestando que temía por su vida y quería evitar que Robert obtuviera la custodia de su hijo. Sin embargo, el abogado defensor de los Geeves, Paul Coady, cuestionó la validez de este testimonio, sugiriendo que había sido influenciado por la presión mediática y los rumores persistentes sobre la familia.
¿Por qué los Geeves son los principales sospechosos?
Los investigadores hallaron un cheque utilizado para comprar una motosierra en la época de la desaparición de la joven. Además, fue importante para la investigación que, dado que la chica nunca llegó al hospital, la fiscalía argumentó que su desaparición tuvo como propósito principal que los Geeves obtuvieran la custodia del bebé.
“La Sra. Haigh fue muy directa e inflexible en cuanto a que una vez que naciera su hijo, le quitarían la vida”, dijo Pisaturo-McMillan. Sin embargo, el abogado defensor Paul Coady argumentó que no hay evidencias físicas de que la joven expresara temor por su vida en esa reunión.
El grupo de abogados de la pareja Geeves insisten en que el caso de la fiscalía está plagado de fallos. “Todo lo que hacían era visto a través de una nube de desconfianza y sospecha”, declararon en su defensa. Coady también refutó el testimonio de la secretaria legal. Sugirió que habían mezclado pruebas debido a la presión mediática y los rumores persistentes sobre la familia.
El testimonio del hijo mayor de los Geeves
En un giro dramático, Robbie Geeves, el hijo mayor de la pareja, fue llamado como testigo. Su testimonio reveló una profunda fractura en la relación familiar. Describió cómo su vínculo con sus padres quedó irremediablemente dañado después de que su padre dejara embarazada a Amber, su exnovia. “No sé cómo decirlo de forma bonita: ella era mi exnovia, no puedes tener un hermanito menor de tu exnovia… no está bien”, expresó Robbie al tribunal.