Pastor Ezequiel Molina critica monopolio, impunidad y aborto en República Dominicana

Pastor Ezequiel Molina critica monopolio, impunidad y aborto en República Dominicana

El pastor Ezequiel Molina criticó hoy la práctica de monopolio de algunas empresas, la impunidad, la legalización del aborto y la proliferación de la delincuencia existe en la República Dominicana, como consecuencia de la pérdida del rol de las madres, así como las familias disfuncionales.

En su discurso de esta tarde en el marco de la tradicional concentración evangélica «Batalla de La Fe», que tiene como tema «Reconciliación», Molina fue enfático en señalar en el país existen varios monopolios de compañías, entre las que citó la empresa de electricidad que, a su juicio, sube la tarifa cada vez que le parece.

Asimismo, dijo que otras empresas con iguales prácticas monopólicas son las Aseguradoras de Riesgos de Salud (ARS), las Aseguradoras de Fondos de Pensiones y otras más que tienen como único objetivo «chupar la sangre del pueblo» dominicano.

Impunidad. En el encuentro realizado en el Estadio Olímpico, que contó con la asistencia de miles de evangélicos, el pastor también criticó los niveles de impunidad que existe en el país, con la presencia de personas que son intocables. Agregó que como consecuencia de este flagelo nacen otros males como los homicidios, sicariatos y otros.

Advirtió que aunque muchos se creen invencibles, por su dinero o poder, siempre existe la posibilidad de que caigan, tal y como lo hizo en aquel entonces el rey Nabucodonosor, según la historia biblíca. Abogó además por la falta de equidad en la administración pública de la riqueza.

Cerradura hermética al aborto. Al referirse al tema del aborto, Ezequiel Molina consideró que no se deben colocar «cerradura hermética» con relación al tema de aborto, al tiempo que criticó el hecho de que se entienda que un niño producto de una violación tenga la culpa de la tragedia, y como consecuencia merezca ser abortado.

«Culpar a un niño, al infante… y él tuvo la culpa de que ella fuera violada. La razón es cómoda», dijo el ministro evangélico quien aseguró que si se entiende que una violación crea un trauma difícil a la mujer, el hecho de que le saquen esa criatura como consecuencia de ese trauma, le provocará otro mayor. «¿Y usted cree que el aborto le va a quitar ese trauma? Si le sacan la criatura para borrar ese trauma, ahora la muchacha va a tener dos traumas, porque ese niño está pendiente en algún lugar y ella va a pensar en eso».

Afirmó que hay casos que se colocan en la categoría de aborto por cualquier causa, sin embargo, luego de haber nacido se convierte posteriormente el sostén de toda una familia. Resaltó que lo antes dicho no quiere decir que el médico no pueda tomar una decisión en el marco de lo que su capacidad le permite, sino que «lo que estamos diciendo es que no puede haber una cerradura hermética; tiene que haber una apertura.

«Es perfecta la ciencia, no se equivocan los médicos; es confiable 100 por ciento el diagnóstico médico o de los equipos electrónicos; si es así, entonces crea en ellos, pero yo conozco caso de que los diagnóstico dicen que no va a servir, y hoy soy estrellas», dijo.

Hijos criados por la televisión. El pastor evangélico aseguró que el principal caldo de cultivo de la delincuencia en el país son los hogares disfuncionales, situación que se expresa en que los padres no atienden a los hijos.

Sostuvo que en la sociedad actual a las madres se le ha quitado su rol de criar a sus hijos, y en cambio se le ha asignado el rol de empresarias, lo que atenta contra los principios y preceptos fundamentales planteados en la biblia.

Puntualizó en que cuando se violan estos preceptos sagrados, entonces es necesario abstenerse a las consecuencias que se traduce en delincuencia y otros males. «¿Quienes están criando a los hijos?, se preguntó Molina, para luego responderse: la televisión.

Llamó al Estado dominicano a reconciliarse con los pensamientos del Padre de la Patria Juan Pablo Duarte, tras indicar que éstos ya se han olvidado. Fustigó a los que llamó «algunos maniquíes» que se pintan como héroes y que creen que son importantes, quienes pretenden quitar de la bandera las biblia y las tres palabras «Dios, Patria y Libertad»